1 Juan 4:1
LAS MANZANAS DE SATANAS TIENEN VENENO
Nos preguntamos, ¿por qué tantos ministros han abrazado el G12 y sus encuentros, sin previamente analizar si realmente es de Dios o no el asunto?
Quizás parte de la respuesta a esa pregunta radique en el hecho de que, sin lugar a dudas, existe un poder espiritual detrás de ese falso modelo que ejerce un poderoso efecto en las personas que se abren y se brindan a él, experimentando fascinación, euforia, aturdimiento, estupor y encantamiento.
Ese falso espíritu se llama “el espíritu de la visión”.
Los pastores interesados en el G12, son convencidos para que viajen a Colombia o a otros lugares, donde se les impartirá el “espíritu de la visión”. Absurdamente, piensan que es el bendito Espíritu Santo, pero, a pesar de que en ningún lugar de la Biblia encontramos la expresión - el “espíritu de la visión” - refiriéndose al Espíritu de Dios, los defensores de esa inconsistencia, tampoco pueden teológicamente sostener esa premisa, ya que la visión del G12 es categóricamente falsa, proveniente de una revelación igual de falsa e inexistente de parte del Altísimo, por lo tanto ese “espíritu de la visión” jamás será proveniente de Dios. La cuestión es simple; si no es de Dios, es que es del diablo.
Enfatizamos el hecho de que esa revelación es falsa, entre otros claros motivos, porque Dios ya ha dado toda la revelación, y se llama la Biblia, y todo añadido al Evangelio es por tanto, anatema (Gálatas 1: 8, 9)
Afán de lo sobrenatural y sensacional Otra de las razones por las cuales muchos se enfrascan en los “Encuentros”, así como en la “visión” de Cash Luna o de César Castellanos, es debido al afán que tienen de ver y experimentar cosas extraordinarias y sobrenaturales.
No les satisface ya la sola Palabra de Dios, y necesitan otros estímulos adicionales. Además, debido a su necia credulidad, no se paran a pensar que no todo lo sobrenatural es de Dios, y que en estos tiempos últimos, al diablo se le ha dado permiso para hacer cosas que muchos ni soñarían (ver Mateo 24: 24; Marcos. 13: 22; 2 Tesalonicenses. 2: 9).
Al hilo de esto, Castellanos se nos presenta como un maestro narrador de experiencias sobrenaturales. El es un innovador en la exposición por escrito de supuestas experiencias personales espirituales – reales o no – que encandilan al más pintado, cuando uno se presta a ello.
En su libro “Sueña y ganarás el Mundo”, que dicho sea de paso, con ese simple título dan ganas de no abrirlo jamás, el visionario autor escribe lo siguiente:
“...abrí los ojos y sólo capté una profunda oscuridad a mi alrededor; imaginé que se trataba de una falla en el fluido eléctrico, pero al mirar hacia abajo, noté que no había piso y que estaba suspendido en el aire, asido de la nada; debajo de mis pies sólo observé un profundo abismo plagado de legiones de demonios que se movían como alfileres en medio de la oscuridad, casi irremediablemente, la ley de la gravedad indicaba que iba a caer en aquel sórdido lugar, y una voz lo confirmó: “¡César, si tú caes, cualquiera de los demonios que has visto te tomará y te llevará a un lugar más profundo en el que quedarás hasta que seas juzgado!”
“...abrí los ojos y sólo capté una profunda oscuridad a mi alrededor; imaginé que se trataba de una falla en el fluido eléctrico, pero al mirar hacia abajo, noté que no había piso y que estaba suspendido en el aire, asido de la nada; debajo de mis pies sólo observé un profundo abismo plagado de legiones de demonios que se movían como alfileres en medio de la oscuridad, casi irremediablemente, la ley de la gravedad indicaba que iba a caer en aquel sórdido lugar, y una voz lo confirmó: “¡César, si tú caes, cualquiera de los demonios que has visto te tomará y te llevará a un lugar más profundo en el que quedarás hasta que seas juzgado!”
Nos detenemos por un momento aquí, para analizar esta experiencia que nos narra Castellanos que dice que él tuvo – dicho sea de paso, el autor en cuestión en ese mismo libro, y en prácticamente todos los demás que ha escrito hasta ahora, constantemente relata decenas de experiencias similares, inauditas para cualquier cristiano “de a pie”; ¡a todas luces, él es un caso especial e irrepetible!
Castellanos asegura que era creyente por algunos años cuando le ocurrió esa experiencia de arriba. La pregunta es obvia; si era nacido de nuevo, ¿Cómo podía esa voz – que no determina de quién provenía – amenazarle de que iba a ir al infierno, esperando a ser juzgado, como le ocurre a todo impío impenitente? Eso no puede ser.
La Biblia es muy clara:
“Ahora pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús” (Romanos 8: 1)
Pero sigue escribiendo Castellanos a renglón seguido:
“Al instante clamé al Señor, diciendo: “¡Jesús, yo he creído en ti, te ruego que me ayudes!”. Sentí que una fuerza superior me tomó de los brazos y me levantó rápidamente, al tiempo que otra voz como de trueno, decía: “Todavía no es hora”. Caí nuevamente, y regresé al cuerpo”
Así pues, Castellanos, después de pedir ayuda al Señor, dice que oyó una voz que dijo: “Todavía no es hora”, ¿Qué significa eso? ¿Significa que no era aún el momento pero que llegará el día en que las palabras de la voz anterior se cumplirán? Si castellanos fuera un impío de seguro que sí. Quizás y después de todo, esa experiencia suya fue real. Desde luego nos deja perplejos el hecho de que dice que “regresó a su cuerpo”, notando que previamente salió de él. Eso lo hace Castellanos constantemente, y a eso se le llama “proyección astral”, o “bilocación”, y es obra de demonios – de hecho es lo primero que aprenden los brujos y los satanistas.
Una narración similar en cuanto a él saliendo del cuerpo, nos la da el visionario autor en su libro, “Liderazgo de Éxito a través de los 12”, en la página 115.
¡Hermanos, prestemos atención a lo que la palabra de Dios nos enseña, y dejemos de ser ingenuos!:
“Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo” (1 Juan 4: 1)
La verdadera manera de probar los espíritus, es con la Biblia en la mano, en la luz que nos da el Espíritu Santo. ¡Hagámoslo!
Infiltrándose con un “espíritu diferente” La llamada visión del G12 y sus católicos encuentros, son un agente muy importante de infiltración en la iglesia evangélica desde unos años a esta parte, actuando a modo de caballo de Troya.
Entre otros disparates, uno que se destacó fue la pretensión que tienen muchos de los adherentes al G12 de tener un “espíritu diferente” al del resto de los creyentes que no están en la visión, cuando la Biblia nos exhorta a guardar la unidad del Espíritu (Efesios 4: 3). Si tienen – y aun presumen tener – un “espíritu diferente”, entonces ya no participan de la bíblica unidad del Espíritu, consecuentemente esto es una declaración formal de división en la Iglesia. Obviamente, jamás podrá provenir esto de Dios.
Otra de las calamidades que se destacaron, en este caso también, llamada falsedad teológica, fue la expuesta por el mismo César Castellanos en su artículo “Restaurando el altar de Dios en el corazón” (3), que a continuación les narro:
“Jesús ha pastoreado toda la iglesia a través de los doce apóstoles. Este es el tiempo para que usted conforme sus doce, Dios no lo ha llamado a ser una piedra suelta en Su iglesia, Él desea que usted forme parte de un grupo de doce, y que a la vez, conforme su propio grupo de doce...” (Énfasis nuestro)
O bien Castellanos es un completo desconocedor de la Palabra, o bien – siendo esto último lo más probable – sabe demasiado bien lo que hace, y por tanto el asunto es claramente intencionado.
Todo creyente recién convertido, que haya leído una sola vez el Nuevo Testamento, sabe que los doce discípulos de Cristo, que a priori sólo fueron once, jamás formaron ningún gobierno de Doce o G12, ya que ninguno de ellos tuvo “sus doce”. Jamás hubieran osado usurpar el lugar de Jesús, que es el Señor y único que goza de la prerrogativa de tener doce bajo Su liderazgo, lo cual implica un importante principio Teocrático, sólo se adjudica al Señor Jesucristo. Si la Iglesia estuviera estructurada en base a un gobierno humano de doce, sería necesariamente una estructura piramidal, sobre cuyo vértice superior estaría un hombre, y no el Señor Jesús. El Señor jamás quiso que esto llegara a ser, ni nada parecido:
“Entonces Jesús, llamándolos, dijo: Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo” (Mateo 20: 25-27)
Ese mismo recién convertido que mencione, después de leer una sola vez el Nuevo Testamento, sabría que es absolutamente impropio asegurar que “Jesús ha pastoreado toda la iglesia a través de los doce apóstoles”, cuando – entre otras razones - la mayoría testimonial neotestamentaria, nos habla de la importantísima labor, digamos, del apóstol Pablo, por quien tenemos mayormente la doctrina apostólica para la vida eclesial e individual. Si no fuera por el amado Pablo, no sabríamos como conducirnos como cristianos; y todos saben – supongo que también Castellanos – que el apóstol Pablo, jamás fue de los doce de Cristo.
La época actual se está caracterizando también por el surgimiento y levantamiento de los llamados “ungidos” (o cristos) que dicen venir en el nombre de Cristo, y que enseñan falsa doctrina, así como su aborrecimiento maldiciente hacia los que amamos la sana doctrina, exponiéndolos ante todos. Esto no nos tiene que extrañar, porque ya fue predicho por el Señor Jesús:(Mateo 24: 4, 5; 10-13)
La obsesión por crecer numéricamente – de “ganar” almas – hace que muchos ministros se enreden en las prácticas del G12 y sus muy secretos “Encuentros”, sin medir previamente las consecuencias de esa decisión. No dudamos de la buena intención de muchos de ellos, pero la buena intención no es suficiente; se puede llegar a estar ¡sinceramente equivocado! Es imprescindible analizar frente a la Biblia lo que en realidad es el G12, antes de tomar esa peligrosa decisión.
Acto de brujería. Secretismo antibiblico En los Encuentros G12
Los participantes tienen que hacer la solemne promesa de que no pueden revelar a nadie qué es lo que se hace en ellos, y qué es lo que han hecho. Deben realizar un voto de silencio que confronta severamente con lo que la Biblia nos enseña.
Por ello decimos que contrasta el secretismo de los Encuentros, con las mismas palabras del Señor Jesús.
“El sumo sacerdote preguntó a Jesús acerca de sus discípulos y de su doctrina. Jesús le respondió: Yo públicamente he hablado al mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en oculto” (Juan 18: 20)
Es imposible de que el G12 sea evangélico.
Porque también según se desprende de las propias palabras de César Castellanos, la salvación según él, se recibe a lo largo de un proceso; contrariamente a la fe evangélica que enseña que al recibir a Jesucristo el individuo, automáticamente es salvo.
César Castellanos escribe así en su libro “Liderazgo de éxito a través de los doce”:
“…El Señor colocó en nuestro corazón el sentir de los Encuentros, retiros espirituales de tres días en los que cada creyente reafirma su fe y obtiene un nuevo nacimiento”
Vea usted la evidente contradicción que hay en dicha afirmación, que casi pasa desapercibida si uno sólo lee de pasada, sin prestar la suficiente atención. ¿Cómo se puede ser creyente, y por tanto, salvo, y a la vez tener la necesidad de obtener un nuevo nacimiento, y además, en el “Encuentro G12”?
Vemos que la intencionalidad preclara de los “Encuentros” del G12, es llevar a los mismos creyentes, haciéndoles creer que no lo son y que necesitan convertirse de veras, cuando, insistimos, ¡ya son creyentes!
Definitivamente, el G12 no es evangélico; es otra cosa.
De una manera casi imperceptible a primera vista, Castellanos da más valor a lo que serían supuestamente los beneficios espirituales que se reciben en los “Encuentros”, que al propio aceptar a Jesús. Escuche con atención lo que él mismo escribe en su libro “Liderazgo efectivo a través de los doce”, página 250:
“El gran problema de muchas denominaciones es que se han llenado de conceptos teológicos y han buscado argumentos bíblicos para convencer a la gente de que no es necesario pasar por liberación, haciéndoles creer que basta con aceptar a Jesús; ante lo cual surgen los siguientes interrogantes: ¿de qué manera se hizo la confesión de fe? ¿Fue una conversión genuina? ¿Se experimentó un verdadero arrepentimiento? (énfasis nuestro)
¿Qué tendrá que ver la salvación, que en definitiva es por recibir a Jesús y que por lo tanto, siempre es por gracia por medio de la fe (Ef. 2: 8), con la ministración de liberación de espíritus inmundos?
¿Es que los demonios pueden de alguna manera impedir la salvación del que se acerca con fe y confianza a Cristo?
¿Es que los demonios “rebajan” la calidad de salvación del verdadero creyente?
Todo ello no son sino argumentos caóticos para validar la razón de sus católicos “Encuentros”.
El concepto de salvación de Castellanos, pasa por la obligación de la liberación y de la llamada sanidad interior, y ambas cosas, dice, se obtienen en sus “Encuentros”. Este es un concepto neo romanista de fe más obras para así conseguir la salvación. Es una atadura y obligación de acudir a esos Encuentros.
Para Castellanos – obviamente siguiendo los dictámenes de la cúpula del Opus Dei y similares – el sólo recibir con fe a Jesús en la vida de uno no es bastante para ser suficientemente salvo, sino que es menester todo un ritual de “ministración” que se realiza ineludiblemente en sus “Encuentros”.
Jamás la ministración de liberación será requisito indispensable en modo alguno para creer que la salvación se pueda producir, y el creyente persevere en la misma.
Es todo lo contrario en todo caso, la verdadera ministración de liberación será efectiva, como consecuencia directa de la salvación de la persona, acto este de gracia divina por medio de Cristo, nuestro Salvador y Señor, y que se recibe por la fe (Efesios 2: 8) Pero a renglón seguido prosigue diciendo Castellanos:
“Muchos no han sido libres de sus ataduras porque su conversión fue superficial y no han abandonado sus hábitos pecaminosos, son personas que nunca se han quebrantado ni doblegado ante el Señor. Es en la ministración donde somos confrontados cara a cara con el pecado hasta que llega el quebrantamiento que es señal de arrepentimiento genuino” (énfasis nuestro) (6)
Es extraña y confusa la teología de Castellanos, y sus declaraciones requieren de un minucioso análisis. En primer lugar, no existe una conversión “superficial”. O uno es convertido, o no lo es. No se puede estar un “poco” convertido, o un “mucho” convertido. Esto es un total absurdo. Dice la Palabra:
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” (2 Corintios 5: 17)
O uno está en Cristo, o no lo está, y si lo está, entonces es una “nueva criatura” como enseña la Palabra.
Si hay personas que “nunca se han quebrantado ni doblegado ante el Señor”, como expresa Castellanos, es que no son verdaderos cristianos, y por mucha ministración que se les dé, jamás servirá de nada.
Por otra parte, el arrepentimiento de la persona lo produce el Espíritu Santo y no la ministración, menos todavía la de los jesuitas “Encuentros”.
Definitivamente el G12 no es evangélico, desde el momento en que se supedita o condiciona la salvación de la persona a la presunta ministración o no de liberación y presunta sanidad interior, y todas estas en el G12, se imparten en los jesuitas “Encuentros”.
Por lo tanto reiteramos; según Castellanos, no es suficiente con haber recibido a Jesús para ser auténticamente salvo, sino que uno “va siendo salvo” conforme va asistiendo a los “Encuentros”, recibiendo allí su “ministración”, y el creyente de la “Visión del G12” se transforma, lo piense o no, en un asiduo esclavo dependiente de esos “Encuentros”, los cuales además no son gratis ni mucho menos, constituyendo una fuente de ingresos fraudulentos para los organizadores de los mismos en muchos lugares.
Al respecto de esto último tenemos el fiel testimonio del Pastor Marcos Andrés Nehoda, de Argentina, el cual participó en uno de esos “encuentros”:
“Finaliza el pacto de silencio, ahora podemos hablar, conversar. Recibimos una sorpresa: la correspondencia de nuestra familia y de nuestra congregación y amistades, preparada de antemano. Se viene el regreso al salón de la iglesia anfitriona, la que recibió el dinero de cada uno de los participantes que, descontando los costos, les deja una ganancia del 60% de lo abonado”.
En Levítico 10:1, se nos habla de que Nadab y Abiú, hijos de Aarón, “tomaron cada uno su incensario, y pusieron en ellos fuego, sobre el cual pusieron incienso, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó”
Hoy en día de igual manera, muchos ofrecen fuego extraño, en vez de fuego santo, que implica la presencia del bendito Espíritu Santo, y confunden al pueblo de Dios con ese fuego extraño, el cual aparenta ser de Dios, pero no lo es, aunque se ofrece o se ministra con él en el nombre de Jesús.
La temática de los “Encuentros” y su espíritu, pretende ser fuego santo, pero no es más que fuego extraño.
“…que Satanás no saque ventaja alguna sobre nosotros, pues no ignoramos sus maquinaciones” (2 Corintios 2: 11).
La apostasía pretende que la máxima cantidad de cristianos se quede en tierra cuando el Señor regrese a por los suyos, y perderlos para siempre, y esta apostasía está predicha en la Palabra de Dios para el final de los tiempos (2 Tesalonicenses 2: 3).Cuando hablamos de apostasía, nos parece algo como muy lejano, algo digno de todos aquellos malvados que abiertamente y de palabra niegan a Jesucristo, diciendo que jamás existió o que era un farsante, o algo por el estilo.
No obstante, la Biblia no enseña eso exactamente. Cuando bíblicamente estamos hablando de apostasía, no es necesario irnos al extremo citado.
El Pastor Hiram Almirudis, en su apreciado artículo “Diecisiete señales de la gran apostasía de los últimos días”, escribe lo siguiente al respecto de ese tipo de apostasía silenciosa:
“Etimológicamente, apostasía entre los antiguos griegos quería decir: “Salirse del camino, continuar caminando paralelamente al camino real pensando que se transita por él, pero arribando a un destino distinto.”
Muchos transitan por un camino religioso, se divierten en él, se sienten realizados, son entretenidos con repertorios carentes de sentido y contenido bíblico, asisten a iglesias donde los pastores tienen la diabólica habilidad de hacer que todos se sientan bien con sus bufonadas. Pero, no transitan por el camino real que es Cristo, sino por el paralelo que les lleva a un destino de condenación.
Por supuesto que la apostasía como tal no ocurre de un día para otro; es un proceso que requiere su tiempo. Pero poco a poco se van deslizando sin darse plena cuenta, y el engaño va tomando lugar en sus vidas, y con él, un cambio de espíritu.
La dependencia del Espíritu Santo poco a poco va siendo cada vez menor para estas queridas personas, al tiempo que van dependiendo cada vez más de otro espíritu.
2 Corintios 11:4
“Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis”
Es terrible lo que está ocurriendo hoy en día. Una inmensa multitud de cristianos bien intencionados, pero con la guardia baja, avanzan por la ruta del error, sin percatarse del gravísimo peligro que corren, porque siguen a hombres que les extravían.
El mensaje que siempre he dejado a todos mis oyentes, ha sido el de la responsabilidad de investigar en el más puro estilo bereano, y buscar la verdad en la Palabra. Debido a los tiempos tan sumamente peligrosos que estamos atravesando, nos es menester cerciorarnos de qué realmente creemos, y de si se ajusta o no a la verdad de la Escritura, y eso es responsabilidad de todos. Como escribe Dave Hunt en su libro “Más allá de la seducción”:
“La fe es una cuestión individual, y no han de ser los pastores, evangelistas o teólogos los únicos “defensores de la fe”; esta es la solemne responsabilidad de cada creyente”
MARTÍN LUTERO Y CÉSAR CASTELLANOS
La Iglesia Cristiana nació del costado herido del Señor -Su Obra en la Cruz del Calvario; así como Eva nació de Adán- y cobró vida cuando sopló sobre ella el Espíritu Santo en Pentecostés. Éste es el origen de la Iglesia que Jesucristo ganó con Su propia Sangre.
¿QUÉ PRETENDIA MARTIN LUTERO?
La Reforma de Martín Lutero fue un VOLVER A LAS SAGRADAS ESCRITURAS; especialmente, a una comprensión cabal de la Salvación por la Fe, de acuerdo a La Palabra de Dios.
La Reforma de Martín Lutero fue un VOLVER A LAS SAGRADAS ESCRITURAS; especialmente, a una comprensión cabal de la Salvación por la Fe, de acuerdo a La Palabra de Dios.
¿QUÉ PRETENDE CESAR CASTELLANOS?
Lo que pretende César Castellanos no es un regreso a Las Sagradas Escrituras; no aporta mayor comprensión o luz sobre lo consignado en La Palabra de Dios.
Al contrario, se basa en una supuesta revelación, que trajo consigo una visión; ambas, sin sustento en Las Sagradas Escrituras, y con prácticas que entran en pugna con La Palabra de Dios.
Por lo tanto, nada podemos ni debemos copiar de lo ‘revelado’ a César Castellanos; porque hacerlo, es desobedecer a lo que ya Dios reveló en La Santa Biblia.
La Iglesia del Señor debe retornar a La Palabra de Dios; necesita leer y escudriñar como un niño, lo ya revelado en Las Sagradas Escrituras.
Y debe comprender que nada puede agregarse ni quitarse de lo consignado en La Santa Biblia; ni siquiera con versiones o traducciones acomodadas al criterio humano. (Ver Apocalipsis 22.18-19).
Tampoco se trata de argumentar que Martín Lutero tenía errores, pero que aun así la Iglesia tomó en cuenta y puso en práctica su reforma. Lutero volvió a La Palabra de Dios, y en siglos subsiguientes se fue puliendo y aclarando aun más lo que inicialmente entendió Martín.
Pero César Castellanos no propuso una vuelta a Las Sagradas Escrituras, las cuales están compuestas únicamente por el Canon de los 66 libros inspirados; al contrario, propuso y aplicó una nueva visión, aparte del Canon Bíblico, que él asegura haber recibido por revelación.
Lo que pretende César Castellanos no es un regreso a Las Sagradas Escrituras; no aporta mayor comprensión o luz sobre lo consignado en La Palabra de Dios.
Al contrario, se basa en una supuesta revelación, que trajo consigo una visión; ambas, sin sustento en Las Sagradas Escrituras, y con prácticas que entran en pugna con La Palabra de Dios.
Por lo tanto, nada podemos ni debemos copiar de lo ‘revelado’ a César Castellanos; porque hacerlo, es desobedecer a lo que ya Dios reveló en La Santa Biblia.
La Iglesia del Señor debe retornar a La Palabra de Dios; necesita leer y escudriñar como un niño, lo ya revelado en Las Sagradas Escrituras.
Y debe comprender que nada puede agregarse ni quitarse de lo consignado en La Santa Biblia; ni siquiera con versiones o traducciones acomodadas al criterio humano. (Ver Apocalipsis 22.18-19).
Tampoco se trata de argumentar que Martín Lutero tenía errores, pero que aun así la Iglesia tomó en cuenta y puso en práctica su reforma. Lutero volvió a La Palabra de Dios, y en siglos subsiguientes se fue puliendo y aclarando aun más lo que inicialmente entendió Martín.
Pero César Castellanos no propuso una vuelta a Las Sagradas Escrituras, las cuales están compuestas únicamente por el Canon de los 66 libros inspirados; al contrario, propuso y aplicó una nueva visión, aparte del Canon Bíblico, que él asegura haber recibido por revelación.
Dice La Palabra de Dios:
“Pero incluso si nosotros o un ángel procedente del Cielo os predicase un evangelio añadido al que os predicamos, sea maldición. Como hemos dicho antes, y ahora digo de nuevo: si alguien os
predica un evangelio añadido al que recibisteis, maldito sea” (Gálatas 1.8-9; traducción literal)
Lamentablemente, con el tiempo la Iglesia se va alejando de las verdades consignadas en La Santa Biblia; por esta razón, constantemente debemos escudriñar Su Palabra y estar atentos para corregir lo deficiente.
Gracias al Señor por los llamados Avivamientos; los cuales, cuando son genuinos producen un regreso a las enseñanzas bíblicas y un ajuste en la vida de cada creyente renovado.
Y ya que hemos mencionado la expresión ‘renovado’: la Renovación no es cambiar todas las cosas; sino, comprobar cuál sea la buena Voluntad de Dios, agradable y perfecta. (Romanos 12.2)
¿Y dónde está revelada Su Voluntad buena, agradable y perfecta? Pues, en La Santa Biblia y no en supuestas ‘revelaciones’ extra-canónicas.
predica un evangelio añadido al que recibisteis, maldito sea” (Gálatas 1.8-9; traducción literal)
Lamentablemente, con el tiempo la Iglesia se va alejando de las verdades consignadas en La Santa Biblia; por esta razón, constantemente debemos escudriñar Su Palabra y estar atentos para corregir lo deficiente.
Gracias al Señor por los llamados Avivamientos; los cuales, cuando son genuinos producen un regreso a las enseñanzas bíblicas y un ajuste en la vida de cada creyente renovado.
Y ya que hemos mencionado la expresión ‘renovado’: la Renovación no es cambiar todas las cosas; sino, comprobar cuál sea la buena Voluntad de Dios, agradable y perfecta. (Romanos 12.2)
¿Y dónde está revelada Su Voluntad buena, agradable y perfecta? Pues, en La Santa Biblia y no en supuestas ‘revelaciones’ extra-canónicas.
Dominionismo o Reino Ahora
Definición
Algunos dominionistas creen que dicha incautación o confiscación de los poderes terrenales será como resultado de las señales, maravillas y milagros por parte de los “ministros muy ungidos” que convencerán al mundo.
Otros creen que será como resultado de una política de conquista militar básicamente, podría entenderse esto como el llamado Reconstruccionismo. La mayoría lo ven como una combinación de ambas.
Esta posición absolutamente postmilenarista (veremos más acerca de este término), es la enseñanza histórica de la iglesia católico-romana.
Muchos creyentes, y muchos de corte pentecostal, son dominionistas aun y sin saberlo.
1. ¿¡REINO AHORA!?
Bajo la bandera del Dominionismo (teología del Dominio o Reino Ahora, Latter Rain Movement, Manifest Sons of God; etc.) tenemos:
* A los Reconstruccionistas;
* A los nuevos apóstoles y profetas;
* A los Reformistas Apostólicos (New Apostolic Reformation);
* A los Restauracionistas (Restoration Movement);
* A los seguidores de la teología del Reemplazo *;
* Al G12 (Gobierno de doce); etc.
* (La llamada teología del Reemplazo es la que enseña que todas las promesas y beneficios de Dios concernientes a Israel pasaron a la Iglesia cuando Israel rechazó al Mesías)
Todos ellos por su cuenta ya están anunciando el establecimiento del Reino para ahora, y la subsiguiente conquista de las naciones.
A. La cuestión del postmilenarismo
Parte de la enseñanza dominionista “Restauracionista” (entiéndase, Movimiento de la Restauración), englobado en el Kingdom Now, tiene como base que los eventos del libro de Apocalipsis ya han sucedido, que son historia, y que el Reino de Cristo como Rey sobre la tierra es ahora.
Creen que el Reino es ahora, llamado el Milenio (Ap. 20: 2-4). Por lo tanto, las creencias de este “movimiento de la Restauración”, que muchos comparten aunque no sepan que se llama así, tienen su naturaleza en la posición POST-MILENIAL.
B. ¿Qué es el POSTMILENARISMO?
El postmilenarismo es la creencia de que Jesús estableció Su Reino en el momento de su Ascensión a los cielos (Hchs. 1: 9), (algunos dicen que en el momento de nacer de María; o en el inicio de su ministerio), y que ahora está reinando de facto a través de Su Iglesia. Entonces, El no volverá hasta que progrese un periodo significativo de gobierno cristiano en este mundo.
Los que así creen, dicen que hay que cristianizar todo el mundo, accediendo al gobierno de las naciones y de las instituciones, y trayendo paz y prosperidad a la humanidad.
El modismo que emplean comúnmente es el de “dominar para Cristo”.
Los postmilenaristas creen:
* Que la Iglesia reinará triunfante antes del regreso de Cristo (Reino Ahora).
* Que la Iglesia es el instrumento que Dios está usando para hacer que Cristo venga en gloria, en poder universal y gloria.
* Que la apostasía, la Tribulación, el Anticristo y otros, son eventos pasados.
* Que en todo caso, el Anticristo es un espíritu que se mueve, como dicen ellos, en los sectores inmovilistas de la Iglesia (contrarios a sus creencias).
* Que la resurrección y el juicio final ocurrirán con la Venida de Cristo en gloria.
Muchos, sin ser conscientes ni darse cuenta, son postmilenaristas en su credo.
Esa es la razón por la cual, muchos esperan que en este tiempo ocurran las cosas que sólo ocurrirán a partir de la venida en gloria de Cristo.
Sólo hay que prestar una mínima atención a cómo va este mundo para ver que de ninguna manera estamos en el Reino que Dios prometió a Israel; ni supuestamente a la Iglesia (teología del Reemplazo).
El concepto de victoria universal (a todo nivel) de la Iglesia, y el Reino en el día de hoy, antes de la venida del Rey, no pueden basarse en un entendimiento pre-milenial, esto es, el Reino es a partir de la venida gloriosa del Rey, sino en un entendimiento postmilenarista.
2. RECUENTO HISTÓRICO DEL REINO AHORA
A. ¿Qué creían los primeros discípulos?
Además de la evidencia bíblica, lo cual es más que suficiente, no está de menos echar un vistazo a lo que creía la Iglesia primitiva.
La idea de que la Iglesia iba a reinar victoriosa en este mundo antes de la venida del Rey, no existía.
Todos los escritos de los primeros discípulos (siglos I y II; así como la misma Biblia), son de corte PRE-MILENIAL, es decir, que habrá un Reino literal que durará mil años y que comenzará justo con la venida de Cristo en gloria a esta tierra (Ap. 20: 4-7).
Para encontrar la primera doctrina de corte post-milenial, deberemos avanzar a partir de los primeros discípulos en la historia de la Iglesia, e ir hasta el tiempo de Orígenes (alrededor del 200 d.C.; s. III).
Este hombre, estudiante de filosofía pagana, y basándose a la hora de interpretar la Escritura en el sistema alegórico griego, introdujo muchas herejías en el seno de la Iglesia.
Orígenes creía:
* En un tipo de reencarnación de las almas;
* En la eventual salvación del diablo;
* En el conocimiento oculto de la Palabra;
* En una supuesta auto-deidad del hombre.
* Que Jesús estaba subordinado al Padre, como un ser creado.
* No creía que Jesús iba a reinar de forma visible sobre la tierra.
Orígenes era más bien era un gnóstico; en otras palabras, él podría ser un actual miembro de la Nueva Era.
Este fue el hombre que encasquetó el postmilenarismo a los creyentes.
Contrariamente, los Padres de la Iglesia escribían acerca de su fe en el Retorno de Cristo para establecer Su Reino desde Jerusalén.
Es una realidad el hecho de que no se ha encontrado un escrito que apoye el postmilenarismo antes del tiempo de Orígenes.
Después de él, apenas se halló, hasta que llegamos a Agustín de Hipona (s. IV-V). Este, cambió muchas de las doctrinas de los primeros creyentes, y así abrió camino a los credos del catolicismo romano hasta hoy.
B. El error de Agustín de Hipona y su influencia hacia el levantamiento del romanismo
Agustín de Hipona (354-430 d. C.) fue un filósofo que se convirtió al cristianismo después de conocer y experimentar diferentes herejías:
* Maniqueísmo, filosofía dualista de Persia;
* Escepticismo, filosofía occidental;
* Neoplatonismo, búsqueda del desarrollo y síntesis de las ideas metafísicas de Platón.
Dice la Enciclopedia Encarta: <>.
Aquí vemos que su enseñanza no fue enteramente escritural.
Por lo tanto, se puede decir que dio a la Iglesia del Estado su base de sacerdocio autoritario y sus rituales sacramentales.
Su visión de la Iglesia como un Reino, definido en su libro “La Ciudad de Dios”, influenció a la Iglesia en un tiempo en el que una enseñanza definida era muy necesaria.
La Iglesia, usó las enseñanzas de Agustín para justificar la idea de:
* Su poder temporal;
* El bautismo de infantes;
* Su riqueza terrenal y poder,
* Su influencia sobre las multitudes en relación con todos los asuntos de la vida, muerte y salvación.
La influencia de Agustín fue esencial para que a lo largo de los siglos el catolicismo romano hubiera rechazado cualquier idea acerca de un futuro Reino Mesiánico, a partir de Israel.
De hecho, cada vez se volvió más antisemita en sus creencias, hasta el punto de apoyar (el Vaticano) a Hitler y a Mussolini en sus esfuerzos de destruir a los judíos.
¡Ninguna doctrina basada en el premilenarismo (el Rey antes que el Reino), hubiera podido ser aceptada o permitida, que pusiera en algún peligro el poder terrenal y la influencia de la “única, santa y eterna indivisible iglesia de Roma”!
Esa es la razón por la cual, el premilenarismo, cuando surgió de nuevo, sólo fue creído por una minoría de creyentes, como los Anabaptistas, los Moravos, y los Irvingitas, aquellos que habían roto con las enseñanzas de la llamada iglesia visible de entonces.
Los judíos siempre entendieron que el Reino era algo literal, futuro; un reino terrenal de Dios que había de venir. Jesús nunca corrigió a los judíos de su día, aunque sí les desafió acerca de otros muchos aspectos de sus creencias.
Nunca jamás asoció Su resurrección con el levantamiento de un Reino judeo-gentil supuestamente llamado Iglesia, y ni tampoco eso estaba en la mente de los primeros cristianos.
El “Oxford Diccionario de la Iglesia Cristiana” (una obra de corte liberal), dice acerca del Reino de Dios:
La idea de que la Iglesia reinaría victoriosa como un Reino en la tierra, antes de la venida en gloria de Cristo, no estaba latente en la Iglesia primitiva, ni tampoco está patente en la Biblia si se es honesto en su interpretación.
Como venimos diciendo, la Biblia misma y todos los escritos de antes de Orígenes, y sobretodo, antes de Agustín de Hipona, son premilenaristas, es decir, enseñan que el Milenio (mil años literales), es decir, el Reino de Dios sobre la tierra, no será sino a partir de que vuelva Cristo en gloria a este mundo, destruyendo a Sus enemigos, reunidos a la sazón en Har Meggido (Armagedón) Ap. 16:13-16; 19: 11-21; 20: 3-6; Dn. 2: 44, 45; 7: 7-14; etc. etc.)
Incluso historiadores liberales y amilenialistas, no tienen otro remedio que admitir que el premilenarismo fue <> 2.
Uno de los más prestigiosos historiadores de la Iglesia, dijo:
Constantino
El error en el que están cayendo todos los proponentes del <>, es exactamente el mismo que aquél de aquellos líderes cristianos del tiempo del emperador Constantino, que confiaron en él.
Siguiendo a Constantino, que dijo haberse convertido al cristianismo (él nunca abandonó el paganismo en realidad), establecieron los principios de lo que luego vino a ser la Iglesia Católico Romana, el fútil intento de teocrizar el mundo entero.
Constantino fue un tipo clarísimo de Anticristo.
C. ¿De dónde surge el dominionismo (Reino Ahora)?/ La Gran Ramera
Cristo nos encomendó la tarea de serle testigo (Hchs. 1: , primeramente en Jerusalén, luego en Judea, Samaria, y lo último de la tierra, nunca nos encomendó el establecimiento visible de Su Reino sobre esta tierra.
Ningún ser humano puede levantarse como representante de Jesucristo en esta tierra con el fin de aplicar una Teocracia antes de que Él vuelva.
Esto ya lo ha intentado el papado a lo largo de 1500 años, inspirado por el mismo satanás, y ahora lo están intentando los proponentes del G12.
¿De dónde arranca ese falso entendimiento del Reino Ahora?
No es nada nuevo. Arrancó desde el principio en que empezó la apostasía en la Iglesia, a partir del siglo III mayormente. Veamos la historia grosso modo:
El Reino antes del Rey es “Reino Ahora” (Kingdom Now). Eso es lo que enseña el postmilenarismo, el cual no fue entendido así por los primeros padres de la Iglesia (tales como Justino Mártir, Ireneo, Tertuliano) como ya vimos, y que no apareció sino por mano de Orígenes en el siglo III.
Posteriormente, Agustín de Hipona (s. IV-V) se encargó de establecer esa doctrina al inicio de la iglesia católica y romana.
Démonos cuenta del hilo conductor que arranca de Orígenes y su espíritu alejandrino, apóstata y su enseñanza postmilenarista, y llega hasta nuestros días en la manifestación del dominionismo carismático y ecuménico:
¿Qué vemos que haya en común en toda esa trayectoria?: El espíritu y la obra de la Gran Ramera. De hecho, el catolicismo romano es ese hilo conductor.
D. ¿Cómo pasó del catolicismo a lo evangélico? Remontémonos un poco en la reciente historia eclesial
En los Estados Unidos de América, surgió a fines del siglo XIX el bendito Movimiento de Santidad, y de él, el Movimiento Pentecostal.
Cuando surgió el movimiento pentecostal, fue una tremenda amenaza para Roma. No era tanto por su hablar en lenguas, sino por sus enseñanzas en cuanto a separación, y santidad.
Los pastores y los predicadores pentecostales de la santidad, de corte absolutamente premilenarista, denunciaban las mentiras del catolicismo romano pública y abiertamente, especialmente en las conferencias de avivamiento.
Decían claramente y sin tapujos que Roma es la Ramera de Apocalipsis capítulo 17, y todos decían ¡amén! a eso.
Pero el Vaticano, a través de todos sus agentes infiltrados, consiguió que se dejara de predicar la separación para predicar la “unidad” (mensaje jesuita).
Del Movimiento Pentecostal, surgió el Movimiento Carismático, el cual fue aceptado y abanderado por el Catolicismo al poco de surgir.
E. El movimiento carismático
El Movimiento Carismático, evolucionó a partir del Movimiento Pentecostal. Así que vemos que algo que fue de Dios, como la predicación de la santidad, y el redescubrimiento de los dones espirituales (1 Co. 12), fue más tarde en parte contaminado por el diablo, y usado para su beneficio gracias a la mala gestión de ciertos siervos de Dios, que por razones diversas, se dejaron seducir por Roma.
El ex jesuita de alto rango, Dr. Alberto Rivera en sus crónicas, dijo lo siguiente:
El Movimiento Carismático, tal y como abiertamente lo expuso el Dr. Rivera, lejos de ser un movimiento de renovación espontáneo del Espíritu Santo, desde su concepción, fue una estratagema cuidadosamente planeada por el Vaticano, manipulando a pentecostales engañados, para implementar su plan para establecer un milenio de dominación mundial 5 (Nuevo Orden Mundial).
De esa manera, irán engañando y seduciendo a cuantos pentecostales puedan:
Bajo la bandera:
* Del “amor verdadero” y
* La “unidad de los cristianos”,
Así ir llevándoles de la mano hacia la meta final del diablo: La marca de la Bestia (Ap. 13: 16-18)
Nótese que es el Falso Profeta el que hace esto, y ¿quién será ese personaje sino un hombre muy especial del Vaticano de Roma?
De ese mover carismático, ya contaminado por el romanismo y su ecumenismo, surge paulatinamente un fuerte sentir dominionista, propio de la Gran Ramera, a partir de la escatología católica, postmilenarista y amilenarista.
El nulo entendimiento de la profecía bíblica, junto con las pretensiones de dominio, fruto de la ambición y codicia de sus profesantes, entre otras cosas, es lo que ha llevado a muchos a ser creyentes de que Ahora es el Reino.
En el siglo XX, el movimiento que destacó desde el principio por su teología dominionista, fue sin duda el Latter Rain; dominionismo en sí mismo.
F. El dominionista Latter Rain Movement
El dominionismo tuvo su aparición pública en la escena evangélica a través del Latter Rain Movement, que fue un movimiento eminentemente dominionista de los años 40 en Canadá y EUA.
Podríamos decir que surgió como tal en 1948 en North Battleford Saskatchewan, Canadá, a través de George, Earnest Hawtin y de P.G. Hunt, los cuales en 1947 fueron a un servicio conducido por William M. Branham (un indiscutible falso profeta, que recibía instrucciones y poder para ministrar directamente de su ángel, el cual vivía ¡dentro de él!) 6
Luego se les unió George Warnock. En 1951, este varón escribió su muy famoso libro “La Fiesta de los Tabernáculos”, en el cual el estableció una doctrina específica para el Latter Rain Movement, y para aquellos que vendrían después.
El enseñó que la Iglesia estaba a punto de acomodar en sí misma la consumación de los festivales de Dios de Israel a través de la perfección de los santos y su dominio sobre la tierra 7 Evidentemente, ese fue (y sigue siendo) un movimiento absolutamente reemplacista.
Latter Rain aportó la creencia de que uno tiene que tener un conocimiento especial o “gnosis”para alcanzar la plenitud de Dios.
Aquellos que tienen ese “gnosis”, llegarán a ser la “verdadera semilla” que traerá liberación a este mundo y establecerá el reino de Cristo sobre la tierra 8
De este movimiento, surge el de los apóstoles y profetas modernos, de los cuáles se espera de ellos que sean esos paladines que encabezarán el establecimiento del Reino en este mundo.
La raíz de las doctrinas del Latter Rain se encuentran en la vieja herejía del Gnosticismo, que enseña que una élite espiritual posee el “conocimiento oculto” del reino espiritual.
Hoy colocan todas sus revelaciones espirituales, experiencias y nuevas interpretaciones de la Escritura por encima de la interpretación de la Palabra de Dios, tal y como la Iglesia siempre la ha conocido y practicado 9
El dominionismo actual está absolutamente impregnado del espíritu y doctrina del Latter Rain (Lluvia tardía).
Cabe decir que esas doctrinas emanadas de esas revelaciones, profecías, sueños y visiones ajenos a la Palabra, siguen vigentes en muchísimos sectores de la carismatía y del pentecostalismo actual, y en muchos creyentes también, los cuales son desconocedores de su procedencia; todo ello, muy a pesar de que en su momento, las denominaciones pentecostales, rechazaran todas estas cosas.
Al respecto, dice Rev. Robert S. Liichow: <<> (Gn. 3: 5)
Uno de los defensores del Restauracionismo (Dominionismo), se pregunta y responde: <<¿Podría Jesús venir hoy? No- ciertas cosas tienen que cumplirse antes de que Jesús pueda volver>> 11
Decir que el Señor Jesús no puede volver aún; y según estos maestros, no puede volver porque la Iglesia todavía no ha terminado su labor de establecer el Reino, es trágico.
No esperan la venida de Cristo, ¡esperan la glorificación de la Iglesia aquí en la tierra sin Cristo presente!
Claramente, los dominionistas lo exponen de esta manera: <<…puedo decir con la autoridad de Dios, que Cristo no puede y no volverá hasta que hayamos manifestado el Evangelio del Reino a las naciones de la tierra. Esa tarea demanda una Iglesia madura, que constituya una alternativa a los reinos del mundo. Eso es el todo acerca de la Iglesia, y el regreso de Jesucristo depende de nosotros>> (Earl Paulk; The Great Escape Theory, p. 14)
Ciertamente la Biblia nos dice que como Iglesia debemos predicar el Evangelio a toda criatura (Mc. 16: 15), y esa es parte de la Gran Comisión, pero extrapolar esto, y decir que tenemos que manifestar una alternativa de poder y gobierno sobre los reinos del mundo para que así pueda regresar el Señor, es otra cosa.
También decir que “el regreso del Señor depende de la Iglesia”, es herejía. El regreso del Señor depende del Padre, y no de la Iglesia.
Es el Padre el que envía al Hijo para desposarse con su novia, la Iglesia. No es la novia la que dice cuándo ha de venir el novio a por ella.
Otro destacado dominionista enseña lo siguiente: <> 12
Pero Jesús no dijo eso. El, por el Espíritu Santo, hace la obra de poder en cada uno de nosotros, y a través de nosotros, porque la gloria debe ser para Dios sólo.
No nos ha dejado solos para que nosotros determinemos qué hacer y cómo “conquistar el mundo para Cristo”.
Si nosotros “controlamos”, y si todo “depende de nosotros”, entonces, si todo sale bien, la gloria será para nosotros y no para Dios, pero esto se da de bruces con la Palabra, la cual asegura que: <> (Is. 42:
En los últimos quince años hasta la fecha, sólo el error doctrinal ha progresado de manera mucho más radical y descarada.
Y si alguien llega a pensar que estos movimientos están de capa caída, o que no tienen incidencia real en la Iglesia, es que son ignorantes de la realidad, y les aconsejo que sólo hagan una pequeña labor de investigación al respecto.
Esta es la conclusión a la que llega un ministro, el pastor Robert S. Liichow, que estuvo en ese mover, y del cual salió cuando buscó de veras a Dios :<> 13
3. INFILTRACIÓN, Y MINISTROS COMPRADOS: (Ver Hchs. 20: 29, 30)
El maligno, a través de sus instituciones satanistas, hoy en día y más que nunca, está enviando a hombres y mujeres suyos al seno de las congregaciones y de los foros internacionales cristianos (2 Co. 11: 13-15), así como levantando mucha brujería, y de la peor, contra los verdaderos ministros del Evangelio y sus familias, etc. (Mt. 16: 18b).
El diablo está convocando a los satanistas de muy alto rango, y perfectamente organizados, y a ciertos brujos en muchos lugares del globo para que derramen mucha sangre, no sólo de animales, sino de personas; para que violen niños y cometan los peores pecados, con el fin de obtener mayor poder.
Está derramando ríos contaminados de falsa doctrina y falsa unción desde las plataformas multitudinarias, a los humildes púlpitos (Mt. 24: 24; Ap. 13: 13)
Hoy en día, los satanistas se están introduciendo en las congregaciones cristianas con la meta de destruirlas, y los pastores parece que no nos percatamos de nada de todo esto.
No podemos dudar de esa realidad porque la misma Palabra de Dios nos lo advierte: <<…falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras>> (2 Corintios 11: 13-15)
El ex satanista William Schnoebelen asegura cuando dice lo siguiente:
<> (Lucifer destronado) pág. 220.
Según el ex jesuita Dr. Alberto Rivera, muchos ministros del Evangelio, han sido comprados por el Vaticano, o amenazados de alguna manera, y luego en sus sermones ya no ha existido el más ligero matiz de desaprobación, ni alusión al catolicismo romano.
Es decir Satanás, ha planeado imitar la encarnación del Hijo de Dios, pasándole todo su poder y autoridad, a un hombre.
El movimiento profético apostólico, es parte del misterio de la iniquidad, o en otras palabras, están trabajando para que Satanás, cumpla su viejo sueño de gobernar el mundo por medio de un hombre, a quien le dará toda su autoridad.
Muchos que no quisieron hacer caso a las advertencias, querrán volverse a Dios, pero eso les costara el ser decapitados, luego de afrontar la sentencias de muerte dictadas por estos miembros DEL MOVIMIENTO PROFETICO APOSTOLICO, QUE EN UNA ASOCIACION DIABOLICA CON ROMA, desataran la más sangrienta persecución que jamás se haya conocido, contra todos aquellos que quieran sostener el testimonio del Señor Jesucristo.
9Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano,
10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;
11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.
Sal 105:9 La cual concertó con Abraham, Y de su juramento a Isaac.
Sal 105:10 La estableció a Jacob por decreto, A Israel por pacto sempiterno,
2 Samuel 7:15 pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, al cual quité de delante de ti.
2 Samuel 7:16 Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
Eze 37:22 y los haré una nación en la tierra, en los montes de Israel, y un rey será a todos ellos por rey; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán divididos en dos reinos.
Eze 37:23 Ni se contaminarán ya más con sus ídolos, con sus abominaciones y con todas sus rebeliones; y los salvaré de todas sus rebeliones con las cuales pecaron, y los limpiaré; y me serán por pueblo, y yo a ellos por Dios.
Eze 37:24 Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán por obra.
Eze 37:25 Habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos, sus hijos y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será príncipe de ellos para siempre.
Jer 31:36 Si faltaren estas leyes delante de mí, dice Jehová, también la descendencia de Israel faltará para no ser nación delante de mí eternamente.
Jer 31:37 Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Mientras que a Israel se le han hecho promesas de bendiciones terrenales que están contenidos en los pactos Abrahamico y Davídico, ambos pactos de naturaleza inconcondicional y cuyo cumplimiento se hará efectivo en el Reino Milenial de Jesucristo.
Visualización
Es otra área que tiene mucha similitud con las enseñanzas de César Castellanos. Al respecto también enseña que: “La fe va muy ligada a las visiones y los sueños, tu conquistas lo que alcances a visualizar, no sientas temor de pintar cuadros en tu mente, en tu interior, cuadros de fe. Dios quiere que entiendas el lenguaje. Cuando logras tener una imagen en tu corazón, en tu mente y la presentas al Señor, y le dices: Señor esta es la imagen, inmediatamente en el reino de los cielos esa imagen es proyectada con amplitud y el Señor le dice a sus ángeles, ángeles ayuden a que esto se haga una realidad lo más pronto posible…”
En primer término, las visiones y los sueños de que se habla aquí, poco tienen que ver con la fe bíblica. Tales sueños y visiones pueden ser utopías nacidas de ambiciones personales, mientras que la fe bíblica siempre se apoya en una promesa de Dios. Es una falsa afirmación la declaración de que siempre se conquista lo que se alcanza a “visualizar”. Miles de casos conocidos indican lo contrario. El esfuerzo del creyente no debe dirigirse a la conquista de sus sueños, sino a la obtención de las promesas de Dios. En segundo lugar, es completamente inexacto, que si tengo una imagen en mi corazón y se la presento al Señor, de inmediato se proyecta amplificada en el cielo y Dios ordena a sus ángeles que “ayuden a que esto se haga una realidad lo más pronto posible”.
La visualización y los sueños es una práctica enfermiza ya que confía en la mente humana y se relaciona con las prácticas del ocultismo de la Nueva Era.
El secreto de éxito ministerial no surge cuando la imagen en nuestro corazón se proyecta en el cielo, sino cuando la imagen del cielo-concebida y diseñada por Dios se proyecta en nuestro corazón. La Biblia asegura que “Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad”. (Filipenses 2:13).Teología del “Reino Ahora” o del “Dominio”
EL MOVIMIENTO PROFETICO APOSTOLICO Y EL MISTERIO DE LA INIQUIDAD
Comenzaremos este breve estudio con una pregunta ¿Qué es el misterio de la iniquidad? Respuesta: es la imitación satánica del misterio de la piedad ¿y qué es el misterio de la piedad? Dejemos que la misma Biblia nos conteste:
1Ti 3:16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne.
Es decir Satanás, ha planeado imitar la encarnación del Hijo de Dios, pasándole todo su poder y autoridad, a un hombre.
El movimiento profético apostólico, es parte del misterio de la iniquidad, o en otras palabras, están trabajando para que Satanás, cumpla su viejo sueño de gobernar el mundo por medio de un hombre, a quien le dará toda su autoridad.
Es por esto, que los que pertenecen a este movimiento HABLAN DEL REINO AHORA, Y ESO EXPLICA EL PORQUE NO HABLAN DE LA GRAN TRIBULACION, NI DE LA INMINENTE VENIDA DE CRISTO, Y COMO EL REINO ES HORA , LAS RIQUEZAS TAMBIEN HAY QUE OBTENERLAS IMPERIOSAMENTE AHORA, Y EN ESTOS LUGARES, SOLO SE HABLA DE PROSPERIDAD MATERIAL, !!PORQUE TODO ES AHORA!!
Todo este movimiento de prosperidad y riqueza está íntimamente relacionado CON EL MISTERIO DE LA INIQUIDAD.
Pues para obtener esas riquezas, se promueven todo un bagaje de prácticas que provienen de la hechicería, tales como VISUALIZAR, CONFESAR Y DECRETAR. Y todos aquellos que estén habituados a estas prácticas, no tendrán mayor inconveniente en aceptar LA RELIGION MUNDIAL UNICA DE LA NUEVA ERA, porque en realidad esas prácticas que promueve el movimiento profético apostólico PROVIENEN DE LA NUEVA ERA.
También proviene de la NUEVA ERA, LA BORRACHERA ESPIRITUAL O “RISA SANTA.”, Es sabido el hecho de que integrantes de LA NUEVA ERA, VIENEN DICIENDO DESDE HACE TIEMPO QUE VENDRIA UN AVIVAMIENTO MUNDIAL QUE ESTARIA DADO POR UN EXTASIS DE RISA INCONTROLABLE.
La clave para entender esto, es que a través de la “MINISTRACION DE LO QUE ELLOS LLAMAN LA UNCION”, millones, están siendo afectados por INFLUENCIAS DEMONIACAS.
Esto nada tiene que ver con El Espíritu Santo. Hay que estar alerta, sabiendo que los chamanes con nombre de apóstol que esparcen esto, intentan silenciar las voces de advertencia, diciendo, que atribuir esto, a influencias demoníacas, es blasfemar contra El Espíritu Santo. Y para desenmascarar esta falacia bastaría hacerse la siguiente pregunta¿ Ustedes piensan, que El Espíritu Santo, que inspiro las Escrituras , para que las escudriñemos con temor reverente, puede ser el responsable de este atontamiento de millones de personas que luego de recibir esta ”unción” lo que menos hacen es escudriñar las escrituras, sino por el contrario, buscar casi con el desespero de quien busca una droga , el ir a tal o cual congreso, para que estos chamanes le den una sobredosis de ESTE FUEGO EXTRAÑO QUE ELLOS LLAMAN UNCION”.
Todo lo anteriormente mencionado, es decir DOMINIONISMO O REINO AHORA, ENFASIS DESMEDIDO EN LA PROSPERIDAD MATERIAL Y EL AVIVAMIENTO DE LA RISA, Se expande a una velocidad meteórica, y todo al amparo de estas famosas coberturas. Que supuestamente están para dar protección espiritual, pero los hechos demuestran que EN REALIDAD SON UNA FORMIDABLE HERRAMIENTA DE MANIPULACION, QUE ADEMAS HA SERVIDO PARA GARANTIZAR LA TOTAL IMPUNIDAD DE ESTOS FALSOS APOSTOLES.
Otro elemento clave en todo este sistema diabólico que se está moviendo en este tiempo final, es que para los apóstoles que pertenecen a este movimiento, es de vital importancia, imponer la necesidad de estar bajo la cobertura apostólica que ellos ofrecen, porque esta cobertura será un factor de presión decisivo para aglutinar y arriar como ganado a los millones que formaran parte de la religión mundial única, cuando se instaure el nuevo orden mundial.
Tienes que saber que cuando los VERDADEROS CRISTIANOS SEAN ARREBATADOS POR EL SEÑOR JESUCRISTO, entonces se conocerá, a que se referían estos apóstoles cuando hablaban DEL REINO AHORA.
Muchos que no quisieron hacer caso a las advertencias, querrán volverse a Dios, pero eso les costara el ser decapitados, luego de afrontar la sentencias de muerte dictadas por estos miembros DEL MOVIMIENTO PROFETICO APOSTOLICO, QUE EN UNA ASOCIACION DIABOLICA CON ROMA, desataran la más sangrienta persecución que jamás se haya conocido, contra todos aquellos que quieran sostener el testimonio del Señor Jesucristo.
Escapa por tu alma, huye de todo lo que tenga que ver con este movimiento, date prisa, no te detengas, acuérdate de la mujer de Lot, no mires para atrás, no importa que tengas que dejar tal vez un titulo ministerial, con el que te han engolosinado.
Que la venida de Cristo por los suyos te halle velando junto al remanente, junto a aquellos que con sencillez de corazón invocan al Señor.
Te ha mentido con eso de que serás parte de un gobierno apostólico, para gobernar cristianamente el mundo. Serás parte si….pero de la religión mundial única que respaldara al anticristo.
La mujer de Lot desoyó la advertencia, y quedo petrificada por el juicio de Dios, y si tu desoyes la advertencia que Dios está lanzando a través de muchos siervos de Dios, lo que quedara petrificada será tu conciencia, llegara el día en que no podrás arrepentirte, será demasiado tarde, para ese entonces tu conciencia estará absolutamente cauterizada y sin miramientos te someterás a recibir la marca de la bestia y así condenarte para toda la eternidad en el lago de fuego y azufre…
La mujer de Lot desoyó la advertencia, y quedo petrificada por el juicio de Dios, y si tu desoyes la advertencia que Dios está lanzando a través de muchos siervos de Dios, lo que quedara petrificada será tu conciencia, llegara el día en que no podrás arrepentirte, será demasiado tarde, para ese entonces tu conciencia estará absolutamente cauterizada y sin miramientos te someterás a recibir la marca de la bestia y así condenarte para toda la eternidad en el lago de fuego y azufre…
Apocalipsis 14:9-11
9Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano,
10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;
11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.
! ESCAPA POR TU ALMA, Y ACUERDATE DE LA MUJER DE LOT!
CUIDADO CON LAS "NUEVAS REVELACIONES" DEL MOVIMIENTO PROFETICO APOSTOLICO
Al estudiar la historia de la Iglesia, nos encontramos que los padres de la iglesia ERAN PREMILENIALISTAS, ES DECIR CREIAN EN EL REINO MILENIAL DE CRISTO AQUI EN LA TIERRA, pero sucedió que cuando el emperador Constantino impuso el cristianismo como la fe obligada de todo el imperio, entonces ciertos líderes de aquella época, consideraron, que seguir predicando que Cristo retornaría a establecer su reino aquí en la tierra, incomodaría al emperador, y en consecuencias SE INVENTARON UNA TEOLOGIA QUE HOY CONOCEMOS COMO AMILENIALISMO. Y EN ESTO CONTRIBUYO MUCHISIMO UN “TEOLOGO” DE AQUEL ENTONCES LLAMADO EUSEBIO.
¿SABIA USTED, QUE LA FORMA DE INTERPRETAR LAS ESCRITURAS PARA SOTENER EL AMILENIALISMO PROVIENE DE LA ESCUELA DE ALEJANDRIA, FUNDADA POR ORIGENES, UN TEOLOGO APOSTATA QUE FUE EL PADRE DEL UNIVERSALISMO?
¿SABIA USTED QUE TIENE NESESARIAMENTE QUE EXISTIR UN REINO TERRENAL PORQUE HAY DOS PACTOS INCONDICIONALES QUE TODAVIA TIENEN QUE SER CUMPLIDOS? ME REFIERO A LOS PACTOS ABRAHAMICO Y DAVIDICO
Jer 31:35 Así ha dicho Jehová, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche, que parte el mar, y braman sus ondas; Jehová de los ejércitos es su nombre:
Jer 31:36 Si faltaren estas leyes delante de mí, dice Jehová, también la descendencia de Israel faltará para no ser nación delante de mí eternamente.
Jer 31:37 Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Jer 31:36 Si faltaren estas leyes delante de mí, dice Jehová, también la descendencia de Israel faltará para no ser nación delante de mí eternamente.
Jer 31:37 Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Una de las grandes herejías en que ha caído gran parte de la iglesia , es el reemplacionismo, falsa doctrina que enseña que Dios ha rechazado definitivamente a Israel por su desobediencia , y que actualmente las promesas contenidas en el pacto Abrahamico y Davídico las está cumpliendo la iglesia .Y EN ESTO PRECISAMENTE CREE EL AMILENIALISMO
Ahora bien, para sostener este error doctrinal hay que negar que el pacto Abrahamico y el pacto Davídico son de carácter incondicional y por lo tanto son pactos que no han sido abrogados y van tener su cumplimiento en el Reino Milenial, y a quien le quedan dudas del carácter incondicional y eterno de estos pactos considere lo siguiente:
DIOS LE PROMETIO A ABRAHAM UNA TIERRA Y UNA DESCENDCIA FISICA, Y ES OBVIO QUE ESTAS PROMESAS NO SE ESTAN CUMPLIENDO EN LA IGLESIA
DIOS LE PROMETIO A ABRAHAM UNA TIERRA Y UNA DESCENDCIA FISICA, Y ES OBVIO QUE ESTAS PROMESAS NO SE ESTAN CUMPLIENDO EN LA IGLESIA
¿Este pacto es condicional o incondicional?
Si se pudiera demostrar que el pacto Abrahamico es condicional, se cae la posición Premilenialista (la que sostiene que los pactos Abrahamico y Davídico se cumplirán en el Reino Milenial)
Si por el contrario se puede demostrar que el pacto es incondicional, se cae la posición reemplacionista SOSTENIDA POR EL AMILENIALISMO
Si se pudiera demostrar que el pacto Abrahamico es condicional, se cae la posición Premilenialista (la que sostiene que los pactos Abrahamico y Davídico se cumplirán en el Reino Milenial)
Si por el contrario se puede demostrar que el pacto es incondicional, se cae la posición reemplacionista SOSTENIDA POR EL AMILENIALISMO
Pruebas de que el pacto Abrahamico es incondicional:
El pacto Abrahamico recibe el nombré de perpetuo en la palabra de Dios:
Gen 17:7 Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y el de tu descendencia después de ti.
Gen 17:13 Debe ser circuncidado el nacido en tu casa, y el comprado por tu dinero; y estará mi pacto en vuestra carne por pacto perpetuo.
1Cronicas 16:17 El cual confirmó a Jacob por estatuto, Y a Israel por pacto sempiterno,
Sal 105:8 Se acordó para siempre de su pacto; De la palabra que mandó para mil generaciones.
Sal 105:9 La cual concertó con Abraham, Y de su juramento a Isaac.
Sal 105:10 La estableció a Jacob por decreto, A Israel por pacto sempiterno,
Las escrituras enseñan con toda claridad que este es un pacto sempiterno, cuyo cumplimiento dependen del poder y de la fidelidad de Dios. Pueden haber suspensiones temporales, por la disciplina Divina a causa de la desobediencia, pero un pacto sempiterno no puede ser abrogado, pues Dios no puede negarse a si mismo.
Un ejemplo de lo que acabamos de afirmar, lo podemos ver con claridad en otro pacto de carácter incondicional EL PACTO DAVIDICO.
2 Samuel 7:14 Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara de hombres, y con azotes de hijos de hombres;
2 Samuel 7:15 pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, al cual quité de delante de ti.
2 Samuel 7:16 Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
Eze 37:21 y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo tomo a los hijos de Israel de entre las naciones a las cuales fueron, y los recogeré de todas partes, y los traeré a su tierra;
Eze 37:22 y los haré una nación en la tierra, en los montes de Israel, y un rey será a todos ellos por rey; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán divididos en dos reinos.
Eze 37:23 Ni se contaminarán ya más con sus ídolos, con sus abominaciones y con todas sus rebeliones; y los salvaré de todas sus rebeliones con las cuales pecaron, y los limpiaré; y me serán por pueblo, y yo a ellos por Dios.
Eze 37:24 Mi siervo David será rey sobre ellos, y todos ellos tendrán un solo pastor; y andarán en mis preceptos, y mis estatutos guardarán, y los pondrán por obra.
Eze 37:25 Habitarán en la tierra que di a mi siervo Jacob, en la cual habitaron vuestros padres; en ella habitarán ellos, sus hijos y los hijos de sus hijos para siempre; y mi siervo David será príncipe de ellos para siempre.
LOS AMILENIALISTAS: afirman que la alianza no esta ya en vigor a causa de la desobediencia de Israel . Pero Dios en su misericordia confirma esta alianza precisamente después de la dispersión de su pueblo.
Jer 31:35 Así ha dicho Jehová, que da el sol para luz del día, las leyes de la luna y de las estrellas para luz de la noche, que parte el mar, y braman sus ondas; Jehová de los ejércitos es su nombre:
Jer 31:36 Si faltaren estas leyes delante de mí, dice Jehová, también la descendencia de Israel faltará para no ser nación delante de mí eternamente.
Jer 31:37 Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Queda claro que para sostener este error doctrinal que conocemos como AMILENIALISMO, hay que ignorar y forzar un montón de pasajes de las escrituras, que claramente prueban que ESTOS PACTOS NO FUERON ABROGADOS
UN ERROR LLEVA A OTRO ERROR, Y ES POR ESO QUE EL AMILENIALISMO DESEMBOCA EN LA ABERRACION DE NEGAR EL RAPTO
Es de fundamental importancia para entender todo este asunto, comprender que la escritura enseña con toda claridad que Israel y la Iglesia son dos cosas diferentes en el eterno plan de Dios.
La Iglesia tiene promesas celestiales y su herencia esta reservada en los cielos,
1 Pedro 1:3-4 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,
Mientras que a Israel se le han hecho promesas de bendiciones terrenales que están contenidos en los pactos Abrahamico y Davídico, ambos pactos de naturaleza inconcondicional y cuyo cumplimiento se hará efectivo en el Reino Milenial de Jesucristo.
Dios ha hecho un paréntesis en el trato con su pueblo Israel, y dentro de ese paréntesis se ubica la Iglesia. Es el paréntesis que en Daniel 9: 26-27 se presenta entre la semana 69 y la semana 70. Es decir entre los versículos 26 y 27 tenemos casi 2000 años de tiempo y dice el versículo 27 por otra semana confirmará el pacto con muchos, obviamente que aquí no puede referirse a otra cosa, que a la persona y al periodo del gobierno del anticristo; periodo en que la iglesia ha de estar ausente, porque se la llevo el Señor, dando así cumplimiento a aquella promesa maravillosa de Apocalipsis 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.
Herejías de los prósperos
Teología de la Prosperidad
El significado de “prosperidad” ha sido distorsionado tanto de tal modo que hablar de bendiciones es hablar de “salud” y “riqueza”, es decir de un “nuevo Evangelio”, el “Evangelio de la Prosperidad”, otros lo llaman “Teología de la Prosperidad.”
Sus enseñanzas:
El significado de “prosperidad” ha sido distorsionado tanto de tal modo que hablar de bendiciones es hablar de “salud” y “riqueza”, es decir de un “nuevo Evangelio”, el “Evangelio de la Prosperidad”, otros lo llaman “Teología de la Prosperidad.”
Sus enseñanzas:
- Que Dios promete prosperidad en lo material, riquezas y éxito a todo aquel que se una a su forma particular de interpretar el Cristianismo.
- Que la forma de adquirir esta prosperidad es por medio de la fe.
- El uso de métodos como los de confesar audiblemente ciertos versículos bíblicos, visualizar en la mente cosas materiales que se deseen y orar pidiéndolas a Dios, o también atar y reprender espíritus de pobreza o espíritus que impiden que vengan las riquezas.
- Un principio muy particular e importante es que ofrendando grandes cantidades de dinero, se promete que Dios se lo devolverá en forma sobrenatural, multiplicado.
Cualquier estudiante serio de la Biblia se puede dar cuenta que la esencia del Cristianismo ha sido suplantada por un sistema de materialismo y egoísmo en donde a Dios se le presenta como un escalón para obtener riquezas y éxito, mientras se fomenta y manipula la avaricia de los congregantes para estimularlos a dar dinero a la organización.
Al redefinir el Evangelio en sus propios términos, esta teología de la prosperidad manipula la Biblia y algunos conceptos cristianos para llevar a la gente al paganismo característico de nuestra sociedad consumista. En otras palabras se trata de una forma cristianizada de materialismo y no de Cristianismo.
La “prosperidad” considerada en el contexto enteramente bíblico, prioriza la riqueza espiritual: “A los ricos de este siglo manda... que sean ricos en buenas obras.” En otras palabras, que a una clase de riqueza agreguen la otra, “que hagan el bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos...” (1 Timoteo 6:17-18). Es hacer tesoros en el Cielo (Mateo 6:19-21). A la generosidad debe sumarse el contentamiento (1 Timoteo 6:1-10; 2 Corintios 9:8; Filipenses 4:12-13).
Cualquier estudiante serio de la Biblia se puede dar cuenta que la esencia del Cristianismo ha sido suplantada por un sistema de materialismo y egoísmo en donde a Dios se le presenta como un escalón para obtener riquezas y éxito, mientras se fomenta y manipula la avaricia de los congregantes para estimularlos a dar dinero a la organización.
Al redefinir el Evangelio en sus propios términos, esta teología de la prosperidad manipula la Biblia y algunos conceptos cristianos para llevar a la gente al paganismo característico de nuestra sociedad consumista. En otras palabras se trata de una forma cristianizada de materialismo y no de Cristianismo.
La “prosperidad” considerada en el contexto enteramente bíblico, prioriza la riqueza espiritual: “A los ricos de este siglo manda... que sean ricos en buenas obras.” En otras palabras, que a una clase de riqueza agreguen la otra, “que hagan el bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos...” (1 Timoteo 6:17-18). Es hacer tesoros en el Cielo (Mateo 6:19-21). A la generosidad debe sumarse el contentamiento (1 Timoteo 6:1-10; 2 Corintios 9:8; Filipenses 4:12-13).
Visualización
Es otra área que tiene mucha similitud con las enseñanzas de César Castellanos. Al respecto también enseña que: “La fe va muy ligada a las visiones y los sueños, tu conquistas lo que alcances a visualizar, no sientas temor de pintar cuadros en tu mente, en tu interior, cuadros de fe. Dios quiere que entiendas el lenguaje. Cuando logras tener una imagen en tu corazón, en tu mente y la presentas al Señor, y le dices: Señor esta es la imagen, inmediatamente en el reino de los cielos esa imagen es proyectada con amplitud y el Señor le dice a sus ángeles, ángeles ayuden a que esto se haga una realidad lo más pronto posible…”
En primer término, las visiones y los sueños de que se habla aquí, poco tienen que ver con la fe bíblica. Tales sueños y visiones pueden ser utopías nacidas de ambiciones personales, mientras que la fe bíblica siempre se apoya en una promesa de Dios. Es una falsa afirmación la declaración de que siempre se conquista lo que se alcanza a “visualizar”. Miles de casos conocidos indican lo contrario. El esfuerzo del creyente no debe dirigirse a la conquista de sus sueños, sino a la obtención de las promesas de Dios. En segundo lugar, es completamente inexacto, que si tengo una imagen en mi corazón y se la presento al Señor, de inmediato se proyecta amplificada en el cielo y Dios ordena a sus ángeles que “ayuden a que esto se haga una realidad lo más pronto posible”.
La visualización y los sueños es una práctica enfermiza ya que confía en la mente humana y se relaciona con las prácticas del ocultismo de la Nueva Era.
El secreto de éxito ministerial no surge cuando la imagen en nuestro corazón se proyecta en el cielo, sino cuando la imagen del cielo-concebida y diseñada por Dios se proyecta en nuestro corazón. La Biblia asegura que “Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad”. (Filipenses 2:13).Teología del “Reino Ahora” o del “Dominio”
La teología del “Reino Ahora” o del “Dominio” enseña que la única manera de que el mundo pueda ser rescatado, debe ser a través del poder temporal y terrenal previamente incautado por la Iglesia al mundo. Sólo después de que de ese modo el mundo haya sido rescatado, podría entonces regresar el Señor Jesús. Muchos lo espiritualizan diciendo que la Iglesia establecerá el Reino en este mundo con el poder de lo Alto. Con ello niegan el rapto o arrebatamiento de la Iglesia y se mofan de la promesa del regreso inminente de Cristo (2 Pedro 3:3,4).
Esta teología impulsa a la Iglesia para que participe activamente en la política, buscando establecer por medio de la conquista del poder gubernativo el reino de Dios aquí y ahora.
Cristo nunca enseñó que la Iglesia sería parte de los sistemas políticos de este mundo. Los hombres son los que están procurando trastocar su verdadera misión.
Los protagonistas de esta teología olvidan que todos los gobiernos humanos, con sus sistemas ideológicos, son pasajeros y efímeros, por lo que la Iglesia corre el riesgo de perder su identidad eterna si entra en relaciones con estos, pues tarde o temprano se comprometerán con el sistema dominante.
El propósito esencial de la teología del “Reino Ahora” es tomar el dominio sobre la tierra, y establecer por medio de la Iglesia un gobierno humano perfecto. Pero ésta y cualquier otra teología están fuera de la realidad bíblica sobre el plan de Dios, porque el Reino de Dios no es, en sentido absoluto, un sistema político establecido por el hombre aquí y ahora. Jesús afirmó: “Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos. Ahora, pues, mi reino no es de aquí” (Juan 18:36). El Reino actual es el reino o gobierno de Jesús en el corazón humano que lo recibe (Lucas 17:21); es espiritual e interno. El Reino futuro (Apocalipsis 12:5,10) es literal y visible; el diablo y la muerte misma serán destruidos (Apocalipsis 20:10,14).
Contrariamente a lo postulado por los que creen que la Iglesia está aquí para establecer el Reino aquí y ahora, y que hasta que la tierra no esté llena del conocimiento de Dios, el Señor Jesús no volverá, Éste, en el Monte de los Olivos, profetizó acerca de la tremenda maldad, rebelión y hasta negación del verdadero Evangelio que iba a ir ocurriendo en crecimiento hasta Su venida en gloria (Mt. 24:3-26)
Mas como en los días como los de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24: 37)
Esta concepción escatológica sin embargo, no debe hacer olvidar la responsabilidad social de la Iglesia, ni tampoco limitar su influencia como “sal” y “luz” (Mateo 5:13-16). Hemos de ser conscientes que la Iglesia y el mundo son dos comunidades radicalmente distintas entre sí como la luz y la oscuridad o la sal y la descomposición; pero los cristianos, para ser de alguna ayuda a la sociedad no cristiana, como “sal” deben penetrar en la carne y como “luz” brillar en la oscuridad (1 Pedro 2:11-17).
La Iglesia Evangélica posesionada de los principios morales y espirituales de Cristo debe influir en la sociedad y el gobierno, pero no como Iglesia identificada con algún partido político, para no politizar el Cristianismo eclipsando su preocupación central, que es la redención del hombre mediante una profunda y personal experiencia con Dios.
CONCLUSION:
No podemos ni debemos ignorar las amenazas y las herejías que se están infiltrando en la Iglesia del Señor, a través de falsos pastores y maestros que encubiertamente están introduciendo falsas enseñanzas y herejías destructivas y con ello llevando por caminos de perdición a quienes los siguen ciegamente sin verificar si esas enseñanzas y esas supuestas nuevas visiones son conforme a la palabra de Dios.
Debemos de tener cuidado con cualquier persona, aunque sea el pastor o ministro más famoso de nuestros tiempos, sobre todo cuando viene anunciando algo novedoso o una supuesta nueva visión.
Tenemos que tener sumo cuidado con toda corriente nueva, o cualquier supuesta visión que cambie los principios fundamentales de la sana doctrina, o mejor dicho que altere las verdades del Evangelio. Debemos de estar claros, que no son los métodos los que dan un verdadero crecimiento a la iglesia; el que da el crecimiento es el Señor. Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. (1 Corintios 3:6).
Pero si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anuncia un evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. (Gálatas 1:8)
Para no equivocarnos y poder distinguir lo verdadero de lo falso, “tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro”, nos recuerda el apóstol Pedro (2 Pedro 1:19).
Ante la falsa piedad y engaño de los falsos pastores y maestros apostatas que enseñan un falso evangelio, defendamos la fe con valor. “También debes saber esto: Que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos..., que (muchos) tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita” (2 Timoteo 3:1,5); “...me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos”
(Judas 3). Dios les bendiga.
Cristo nunca enseñó que la Iglesia sería parte de los sistemas políticos de este mundo. Los hombres son los que están procurando trastocar su verdadera misión.
Los protagonistas de esta teología olvidan que todos los gobiernos humanos, con sus sistemas ideológicos, son pasajeros y efímeros, por lo que la Iglesia corre el riesgo de perder su identidad eterna si entra en relaciones con estos, pues tarde o temprano se comprometerán con el sistema dominante.
El propósito esencial de la teología del “Reino Ahora” es tomar el dominio sobre la tierra, y establecer por medio de la Iglesia un gobierno humano perfecto. Pero ésta y cualquier otra teología están fuera de la realidad bíblica sobre el plan de Dios, porque el Reino de Dios no es, en sentido absoluto, un sistema político establecido por el hombre aquí y ahora. Jesús afirmó: “Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos. Ahora, pues, mi reino no es de aquí” (Juan 18:36). El Reino actual es el reino o gobierno de Jesús en el corazón humano que lo recibe (Lucas 17:21); es espiritual e interno. El Reino futuro (Apocalipsis 12:5,10) es literal y visible; el diablo y la muerte misma serán destruidos (Apocalipsis 20:10,14).
Contrariamente a lo postulado por los que creen que la Iglesia está aquí para establecer el Reino aquí y ahora, y que hasta que la tierra no esté llena del conocimiento de Dios, el Señor Jesús no volverá, Éste, en el Monte de los Olivos, profetizó acerca de la tremenda maldad, rebelión y hasta negación del verdadero Evangelio que iba a ir ocurriendo en crecimiento hasta Su venida en gloria (Mt. 24:3-26)
Mas como en los días como los de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre” (Mateo 24: 37)
Esta concepción escatológica sin embargo, no debe hacer olvidar la responsabilidad social de la Iglesia, ni tampoco limitar su influencia como “sal” y “luz” (Mateo 5:13-16). Hemos de ser conscientes que la Iglesia y el mundo son dos comunidades radicalmente distintas entre sí como la luz y la oscuridad o la sal y la descomposición; pero los cristianos, para ser de alguna ayuda a la sociedad no cristiana, como “sal” deben penetrar en la carne y como “luz” brillar en la oscuridad (1 Pedro 2:11-17).
La Iglesia Evangélica posesionada de los principios morales y espirituales de Cristo debe influir en la sociedad y el gobierno, pero no como Iglesia identificada con algún partido político, para no politizar el Cristianismo eclipsando su preocupación central, que es la redención del hombre mediante una profunda y personal experiencia con Dios.
CONCLUSION:
No podemos ni debemos ignorar las amenazas y las herejías que se están infiltrando en la Iglesia del Señor, a través de falsos pastores y maestros que encubiertamente están introduciendo falsas enseñanzas y herejías destructivas y con ello llevando por caminos de perdición a quienes los siguen ciegamente sin verificar si esas enseñanzas y esas supuestas nuevas visiones son conforme a la palabra de Dios.
Debemos de tener cuidado con cualquier persona, aunque sea el pastor o ministro más famoso de nuestros tiempos, sobre todo cuando viene anunciando algo novedoso o una supuesta nueva visión.
Tenemos que tener sumo cuidado con toda corriente nueva, o cualquier supuesta visión que cambie los principios fundamentales de la sana doctrina, o mejor dicho que altere las verdades del Evangelio. Debemos de estar claros, que no son los métodos los que dan un verdadero crecimiento a la iglesia; el que da el crecimiento es el Señor. Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. (1 Corintios 3:6).
Pero si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anuncia un evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. (Gálatas 1:8)
Para no equivocarnos y poder distinguir lo verdadero de lo falso, “tenemos la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro”, nos recuerda el apóstol Pedro (2 Pedro 1:19).
Ante la falsa piedad y engaño de los falsos pastores y maestros apostatas que enseñan un falso evangelio, defendamos la fe con valor. “También debes saber esto: Que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos..., que (muchos) tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita” (2 Timoteo 3:1,5); “...me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos”
(Judas 3). Dios les bendiga.
A LOS PREDICADORES DEL REINO AHORA
Esta doctrina consiste en creer que Cristo vino a reformar la sociedad, que vino a atenuar los males del egoísmo, a dar una visión más amplia al género humano, y a producir por medio de su ejemplo y sus preceptos y su ejemplo tal cambio en los asuntos humanos, sociales, políticos, económicos y domésticos que haría realidad los profundos anhelos del hombre por alcanzar una existencia pacífica y feliz sobre la tierra, introduciendo así lo que estos “maestros” se complacen en llamar “el reino de Dios”.
En primer lugar, Jesucristo vino a salvar a los pecadores, no a las naciones, o sociedades. Ahora, los pecados son transgresiones individuales en contra de un Dios personal. No hay en la Escritura algo así como una “sociedad” cuya condición pueda ser “cambiada” o “mejorada” como sueñan los del evangelio del “reino ahora”
Halagan la vanidad de los hombres y los protege de la convicción pensar que son tratados como “sociedad” y no como almas culpables que necesitan un perdón personal por medio de la sangre derramada de Cristo. Por consiguiente este “evangelio” arrastra a vastas concurrencias de hombres y mujeres inconversos “miembros” y “no miembros de iglesias”. Sus predicadores son aplaudidos y muy populares.
Yo afirmo que la mayoría de los predicadores populares del presente NO SABEN lo que significa la culpa humana delante de Dios, NO SABEN que Cristo realmente sufrió la ira bajo la mano de Dios, por el pecado del mundo. NO SABEN que fue desamparado por Dios, que de otra manera lo hubiera sido toda la raza. !Afirmo que están predicando como si un Cristo no rechazado y no crucificado aún se ofreciera al mundo!
Predican el carácter de Jesús, diciendo cosas bonitas de El, e instando a la gente a seguir su ejemplo, mientras que la verdad realmente solemne de que Cristo “llevo nuestros pecados en su propio cuerpo en el madero” que fue “herido por nuestras rebeliones”; que “fue desamparado por su Dios”, ” que Dios no perdonó a su propio Hijo sino que lo entregó” y todo por nuestras transgresiones, nunca se le dice a la infeliz gente!
¿Cómo te atreves a llamarte creyente en las Escrituras, mientras que niegas palabras tan claras y predicas el sueño insensato de que el mundo, cambiará gradualmente de carácter, estando el Diablo (su príncipe y dios) todavía en El?. ! Es una mentira! y los que la predican, predican una mentira.
Oh evangélico del reino ahora, si estás buscando un estado cambiado del mundo ¿quién te ayudará a producirlo? No será el Espíritu Santo! porque El ha inspirado a los hombres que escriban que ocurrirá precisamente lo contrario! que los hombres se odiarán unos a otros y que el mundo irá de mal en peor hasta el mismo retorno de Cristo. !Y sabemos que los cristianos entendidos no intentarán producir lo que ellos saben por la palabra de Dios que no sucederá! Y los cristianos ignorantes no pueden ayudarte, porque no saben cómo. y sabemos que este mundo egoísta no se preocupará por entrar a tu reino predicado, porque tú y yo sabemos que está aferrado a sus propios intereses y así permanecerá. Satanás tampoco puede hacerlo !aunque quisiera!
Así que estás abandonado a ti mismo tú que predicas esta mentira!
EL FALSO PROFETA WILLIAM SOTO SANTIAGO
Que tipito este
Por Erick Vivanco - Recopilado y Adaptado por David Pérez
William Soto Santiago, es un Puerto Riqueño, que deja entrever, en sus seguidores que “EL ÁNGEL MENSAJERO DE APOCALIPSIS”. Es pastor de la Iglesia Internacional, La voz de la Piedra Angular. William, basa sus creencias y doctrinas y revelaciones en las de un antiguo "profeta" llamado William Marrion Branham, esta secta es más conocida como el Branhamismo.
William Branham nació, el 6 de abril del 1909 y falleció el 24 de diciembre del 1965. Como todo profeta, que trae la más excelente revelación del cielo, Branham, también tiene su propia experiencia espiritual, léala a continuación:
William Soto Santiago, es un Puerto Riqueño, que deja entrever, en sus seguidores que “EL ÁNGEL MENSAJERO DE APOCALIPSIS”. Es pastor de la Iglesia Internacional, La voz de la Piedra Angular. William, basa sus creencias y doctrinas y revelaciones en las de un antiguo "profeta" llamado William Marrion Branham, esta secta es más conocida como el Branhamismo.
William Branham nació, el 6 de abril del 1909 y falleció el 24 de diciembre del 1965. Como todo profeta, que trae la más excelente revelación del cielo, Branham, también tiene su propia experiencia espiritual, léala a continuación:
A la temprana edad de siete años, William Marrion Branham escuchaba voces angelicales que le hablaban de la palabra y de los mandatos de Dios. Eventualmente, un día de mayo del año 1946, un ángel que se identifica ante William como un enviado de Dios, le señala a este su próxima y especial misión: ser el anunciante divino de la segunda venida de Jesucristo a la Tierra, divulgar a toda la humanidad que los hechos revelados en el libro del Apocalipsis sucederán en una fecha muy cercana y que es tiempo de seguir las enseñanzas del Creador Divino y prepararse para la gran batalla final. Branham, quien se identificó como el profeta Elías y el ángel del Séptima Sello del libro de Apocalipsis, llegó a ser un evangelista y sanador famoso en los EUA y en América del Sur durante los años 50.
El movimiento de William Branham se inicia de esta manera y de él surgen grupos o movimientos hermanos como el de La Voz de la Piedra Angular, liderado por el "profeta" puertorriqueño William Soto Santiago, quien tiene su sede internacional en Cayey, Puerto Rico.
La doctrina más extraña, es la que habla acerca de la semilla de Satanás. Esta doctrina, dice que el pecado de Eva fue haber tenido relaciones sexuales con la serpiente. Eva, habiendo quedado embarazada de la serpiente dio a luz a Caín, y desde ahí, nació, lo que esta doctrina llama como, el linaje de los hijos del diablo. A la vez Branham enseñó, que los salvos, son los pertenecientes a la semilla de Elohim, es decir, los que pertenecen al linaje de Adán.
¿William Soto Santiago el Ángel Mensajero?
William, como ya hemos dicho, se autoproclama o por lo menos deja entrever que es el Ángel enviado Por el Mesías Yeshua, en el Apocalipsis, ya que eso es lo que piensan de el los integrantes de su secta, para justificar esto, él usa los siguientes textos:
“Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Elohim de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto” (Apocalipsis 22:6)
El movimiento de William Branham se inicia de esta manera y de él surgen grupos o movimientos hermanos como el de La Voz de la Piedra Angular, liderado por el "profeta" puertorriqueño William Soto Santiago, quien tiene su sede internacional en Cayey, Puerto Rico.
La doctrina más extraña, es la que habla acerca de la semilla de Satanás. Esta doctrina, dice que el pecado de Eva fue haber tenido relaciones sexuales con la serpiente. Eva, habiendo quedado embarazada de la serpiente dio a luz a Caín, y desde ahí, nació, lo que esta doctrina llama como, el linaje de los hijos del diablo. A la vez Branham enseñó, que los salvos, son los pertenecientes a la semilla de Elohim, es decir, los que pertenecen al linaje de Adán.
¿William Soto Santiago el Ángel Mensajero?
William, como ya hemos dicho, se autoproclama o por lo menos deja entrever que es el Ángel enviado Por el Mesías Yeshua, en el Apocalipsis, ya que eso es lo que piensan de el los integrantes de su secta, para justificar esto, él usa los siguientes textos:
“Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Elohim de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto” (Apocalipsis 22:6)
“Yo Yeshua he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las congregaciones. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana” (Apocalipsis 22:16)
En estos textos, jamás se dice que el Ángel enviado por el Mesías Yeshua, ha de presentarse en los postreros días. Lo que realmente nos muestra este pasaje, es que, el Mesías ya envió a su ángel, ¿Y cuado ocurrió esto?, Pues muy simple, el Ángel que anuncio a Juan en la isla de Patmos. En Apocalipsis 1:1, se dice claramente, que este Ángel, le anuncio al Apóstol Juan, las cosas que debían suceder en el futuro, y en ninguna parte se dice, que este ángel, se manifestaría en los tiempos futuros. Leamos a continuación:
“La revelación de Yeshua, que Elohim le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan” (Apocalipsis 1:1)
¿Se da cuenta usted? William Soto, dice que él es este Ángel, sin embargo, Apocalipsis dice que la profecía ya fue declarada a Juan, por medio del ángel que Elohim envió. Tampoco dice, que es, el Ángel mensajero de Elohim, el cual se ocuparía de anunciar la profecía, sino que dice, que el ángel, era el medio, que Elohim uso, para que Juan el Apóstol, diera a conocer la revelación de las cosas que debían suceder.
Por lo tanto, de esta sencilla manera, se refuta y se hace pedazos la falsa y engañosa enseñanza de William Soto, que dice que él es el Ángel enviado de Elohim, para mostrar la profecía del Apocalipsis.
Otra ridiculez que enseña William Soto, es que; El Mesías Yeshua está volando sobre latino América, llevando su revelación apocalíptica, y lo hace a través de su ángel mensajero, “William Soto Santiago”. Por supuestos, que esta enseñanza tampoco tiene ningún hacedero bíblico, por donde se le mire, está absolutamente errada. No hay ningún pasaje de la escritura que respalde esa enseñanza.
Como podemos ver, es inmensamente grande la mentira que enseña este hombre, lo más lamentable de todo es que muchas personas siguen y escuchan sus disoluciones, no olvidemos lo que dijo el Apóstol Pablo, inspirado por el Espíritu santo:
“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas” (Timoteo 4:3)
“Pero el Espíritu dice claramente que en los siguientes tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios” (1Timoteo 4:1)
Es justamente lo que sucede con las personas ignorantes, que pena por ellos, que siguen las mentiras de este hombre, ya que teniendo comezón de oír algo diferente, al primitivo evangelio del Mesías, oyeron a las doctrinas de demonios.
William Soto y La Señal del Hijo del Hombre...
Otra ridícula enseñanza de William Soto, es la de la Señal del Hijo del Hombre, que él dice ser la siguiente imagen:
Esta imagen, supuestamente vista por millones de personas, en distintos puntos de la tierra, según los de la Iglesia angular, es la señal del Mesías.
Sin embargo, la palabra de Dios dice claramente, que esa señal se manifestara solo cuando el Mesías aparezca por segunda vez, en su retorno a la tierra.
"Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro." (Mateo 24:30)
Este pasaje dice claramente que esa señal será vista únicamente en el retorno del Mesías a la tierra. Además, este pasaje nos dice que esa Señal, es el mismo Mesías viniendo en las nubes de cielo, no esa barata imagen que promueve este falso profeta y esta secta llamada piedra angular. Veamos que esa señal que aparecerá, será el mismo Mesías en las nubes, ¿Por qué?
El pasaje comienza diciendo que: "Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo” Y luego dice que la gente vera, esa señal, ¿Qué es lo que la gente vera? El mismo pasaje nos contesta: “y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo” Por lo tanto, decir que esa ridícula imagen es la Señal del Mesías, es una mentira de las más grandes, ya que, el Mesías no ha regresado a la tierra por segunda vez aun. Y porque, esa señal no será ningún objeto en especial, sino que el Mismo Mesías Jesús, viniendo en las nubes del cielo.
Conclusión
1.- William Soto, es seguidor de las enseñanzas de un falso profeta llamado William Branham. El cual, como todo falso iluminado dice tener experiencias sobre naturales, con un ángel enviado de Dios.
2.- William Soto, no es el Ángel mensajero de Dios, con la revelación apocalíptica, ya que ese Ángel ya se manifestó a Juan, para que el diera a conocer la revelación de las cosas que tienen que suceder.
3.- La nube, la cual es llamada por la secta de la piedra angular, la señal del hijo del hombre, no es más que gran engaño. Ya que, La señal es, el Mismo Mesías, y solo aparecerá cuando el vuelva con gran poder y gloria, por segunda vez a salvar a los que le esperan.
Conclusión
1.- William Soto, es seguidor de las enseñanzas de un falso profeta llamado William Branham. El cual, como todo falso iluminado dice tener experiencias sobre naturales, con un ángel enviado de Dios.
2.- William Soto, no es el Ángel mensajero de Dios, con la revelación apocalíptica, ya que ese Ángel ya se manifestó a Juan, para que el diera a conocer la revelación de las cosas que tienen que suceder.
3.- La nube, la cual es llamada por la secta de la piedra angular, la señal del hijo del hombre, no es más que gran engaño. Ya que, La señal es, el Mismo Mesías, y solo aparecerá cuando el vuelva con gran poder y gloria, por segunda vez a salvar a los que le esperan.
Profetas y Videntes
(Antiguamente en Israel cualquiera que iba a consultar a Dios, decía así: Venid y vamos al vidente; porque al que hoy se llama profeta, entonces se le llamaba vidente.) 1 Samuel 9:9.
Profeta
Heb. nâbî' (su raíz está en la palabra naba', que significa "proclamar", "dar voces", "declarar") "llamado [por Dios]".
Tal como se la usa en la Biblia, la palabra nabi', describe a uno que proclama mensajes divinos.Esos mensajes pueden relacionarse con el pasado, el presente o el futuro y pueden consistir en descripciones, exhortaciones, instrucciones, consuelo o predicciones.
Profeta
Heb. nâbî' (su raíz está en la palabra naba', que significa "proclamar", "dar voces", "declarar") "llamado [por Dios]".
Tal como se la usa en la Biblia, la palabra nabi', describe a uno que proclama mensajes divinos.Esos mensajes pueden relacionarse con el pasado, el presente o el futuro y pueden consistir en descripciones, exhortaciones, instrucciones, consuelo o predicciones.
La palabra castellana "profeta" procede del griego προφητης profêtês
Una combinación de la preposición = προ pro (antes de) con el verbo φημι phêmi = demostrar o dar a conocer sus pensamientos, afirmar, hablar, decir (de la misma raiz de: φως phôs = luz, luminosidad y φαινω phainô = iluminar, emitir o reflejar luz). Un profeta es alguien que, como portavoz de Dios, expresa los pensamientos de Dios con el propósito de iluminar a los hombres, o, en otras palabras: alguien que primero recibía instrucciones de Dios y luego las transmitía a la gente iluminándoles así el camino.
Estos 2 aspectos de su obra se reflejaban en los nombres con que se los conocía: vidente (jôzeh o rô'eh) y profeta (nâbî'). El 1º fue más común en el período temprano de la historia hebrea (1 Sam. 9:9).
Tal como usa Moisés el término, generalmente se aplica a un receptáculo de las revelaciones divinas. Durante el período de los jueces, el término "vidente", ro'eh, parece haberse comenzado a usar y parece haberse mantenido hasta el tiempo de Samuel, cuando lo reemplazó a su vez el vocablo más antiguo.
El término que se usa con mayor frecuencia es nâbî' , pues lo designa como vocero de Dios. Como "vidente" discernía la voluntad de Dios, y como "profeta" la trasmitía a otros.
El término que se usa con mayor frecuencia es nâbî' , pues lo designa como vocero de Dios. Como "vidente" discernía la voluntad de Dios, y como "profeta" la trasmitía a otros.
Sacerdotes y Profetas
El profeta es una persona llamada y calificada en forma sobrenatural como portavoz de Dios. En los tiempos del Antiguo Testamento:
Los sacerdotes eran los representantes del pueblo ante Dios (sus portavoces y mediadores). El profeta, en un sentido especial, era el representante oficial de Dios entre su pueblo sobre la tierra.
El oficio sacerdotal era hereditario. La designación de un profeta provenía del llamado divino.
El sacerdote, como mediador en el sistema de sacrificios, conducía a Israel en la adoración, aunque sus deberes secundarios incluían dedicar una parte de su tiempo a instruir al pueblo acerca de la voluntad de Dios como ya había sido revelada por los profetas, Moisés en particular. La tarea primordial del profeta era la instrucción religiosa.
El sacerdote se ocupaba mayormente de la ceremonia y los ritos del santuario (que se centraban en la adoración pública), en la mediación para el perdón de los pecados, y en el mantenimiento ritual de las relaciones correctas entre Dios y su pueblo. El profeta era principalmente un maestro de justicia, de espiritualidad y de conducta ética, un reformador moral con mensajes de instrucción, consejo, amonestación y advertencia, y su obra a menudo incluía la predicción de eventos futuros.
En el caso de Moisés, uno de los mayores profetas (Deut. 18:15), la profecía fue una función comparativamente menor.
Profetas del siglo VIII a.C.
Incluye a Jonás, Amós, Oseas, Miqueas e Isaías, aproximadamente en ese orden.
El siglo VIII fue testigo del surgimiento de Asiria, y antes de finalizar este período la nación llevó cautivas a las 10 tribus del reino del norte, con lo que la nación desapareció. En por lo menos dos ocasiones también Judá estuvo a punto de ser destruido por los asirios.
El papel principal de los profetas del s. VIII habría sido, primero, evitar, si era posible, la cautividad del reino del norte llamando a su pueblo a volverse al servicio y a la adoración del verdadero Dios, pero también -particularmente en el caso de Isaías - sostener al reino del sur durante este tiempo de gran crisis nacional.
Con la muerte de Isaías el don profético parece haberse silenciado por medio siglo o algo más
Samuel y "los hijos de los profetas"
En un sentido más amplio del vocablo, profetas hubo desde los primeros días del mundo. Tanto Abrahán (Gén. 20:7) como Moisés (Deut. 18:15) fueron llamados profetas.
Durante el período de los jueces el oficio profético languideció, y "la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia" (1 Sam. 3:1).
El llamado de Samuel hacia el final de ese período fue trascendental. Fue el primer "profeta" en el sentido más estricto de la palabra, y se lo puede considerar como fundador del oficio profético; iba de lugar en lugar como maestro de Israel (1 Sam. 10:10-13; cf 1 Sam 7:16, 17).
Después de él y hasta el fin del tiempo del Antiguo Testamento, diversos hombres escogidos hablaron a la nación en nombre de Dios, interpretando el pasado y el presente, exhortando a la justicia, y siempre dirigiendo su vista al futuro glorioso que Dios les había señalado como pueblo.
Samuel habría fundado lo que se conoce como "las escuelas de los profetas". Los jóvenes que recibían su educación en estas escuelas (1 Sam. 19:20) eran conocidos como los "hijos de los profetas" (2 Rey. 2:3-5).
La 1ª de tales escuelas que se mencionan estuvo en Ramá (1 Sam. 19:18, 20), la sede de Samuel (1 Sam. 7:17). Los hijos de los profetas no eran necesariamente recipientes directos del don profético, pero eran divinamente llamados, como los ministros evangélicos de hoy, para instruir a la gente acerca de la voluntad y los caminos de Dios.
Las escuelas de los profetas fueron una poderosa fuerza que limitó el avance de la marea del mal, que tan a menudo amenazó con sumergir al pueblo hebreo bajo una inundación de idolatría, materialismo e injusticia, y proporcionó una barrera contra la ola de corrupción que avanzaba con mucha rapidez.
Estas escuelas proveyeron el adiestramiento mental y espiritual a jóvenes seleccionados que serían los maestros y dirigentes de la nación
Durante el período de los jueces el oficio profético languideció, y "la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia" (1 Sam. 3:1).
El llamado de Samuel hacia el final de ese período fue trascendental. Fue el primer "profeta" en el sentido más estricto de la palabra, y se lo puede considerar como fundador del oficio profético; iba de lugar en lugar como maestro de Israel (1 Sam. 10:10-13; cf 1 Sam 7:16, 17).
Después de él y hasta el fin del tiempo del Antiguo Testamento, diversos hombres escogidos hablaron a la nación en nombre de Dios, interpretando el pasado y el presente, exhortando a la justicia, y siempre dirigiendo su vista al futuro glorioso que Dios les había señalado como pueblo.
Samuel habría fundado lo que se conoce como "las escuelas de los profetas". Los jóvenes que recibían su educación en estas escuelas (1 Sam. 19:20) eran conocidos como los "hijos de los profetas" (2 Rey. 2:3-5).
La 1ª de tales escuelas que se mencionan estuvo en Ramá (1 Sam. 19:18, 20), la sede de Samuel (1 Sam. 7:17). Los hijos de los profetas no eran necesariamente recipientes directos del don profético, pero eran divinamente llamados, como los ministros evangélicos de hoy, para instruir a la gente acerca de la voluntad y los caminos de Dios.
Las escuelas de los profetas fueron una poderosa fuerza que limitó el avance de la marea del mal, que tan a menudo amenazó con sumergir al pueblo hebreo bajo una inundación de idolatría, materialismo e injusticia, y proporcionó una barrera contra la ola de corrupción que avanzaba con mucha rapidez.
Estas escuelas proveyeron el adiestramiento mental y espiritual a jóvenes seleccionados que serían los maestros y dirigentes de la nación
Profetas del siglo VII a.C.
Este siglo fue testigo del apogeo de Asiria, pero antes de terminar la centuria había desaparecido del escenario de acción y el Imperio Caldeo o Neobabilónico había ocupado su lugar.
Durante los años de decadencia de Asiria y de surgimiento de los caldeos, Dios envió a varios profetas para llamar al pueblo de Judá a una reforma completa que impidiera la inminente cautividad babilónica.
Entre esos profetas estaban Nahum, Habacuc, Sofonías, Jeremías y, tal vez, Joel.
Profetas del periodo del cautiverio babilónico
Estos fueron Jeremías, Ezequiel, Daniel y, quizás, Abdías.
La meta principal de los mensajes de este período fue ayudar a Judá a comprender el propósito que Dios tenía al permitir el cautiverio, inspirar esperanza en una restauración, y elevar los ojos de los judíos a la gloriosa oportunidad que los esperaba al regresar de la cautividad si eran fieles a Dios.
Jeremías entregó sus mensajes a los habitantes de Jerusalén y Judá antes y durante el comienzo del cautiverio, y Ezequiel ministró a los exiliados en Babilonia, Daniel fue enviado a la corte de Nabucodonosor para comunicar la voluntad de Dios al gran monarca y conseguir su cooperación con el plan divino para el pueblo de Dios.
Profetas postexílicos
Hageo, Zacarías y Malaquías.
Hageo y Zacarías animaron al pueblo a levantarse y construir el templo; Zacarías recibió una serie de visiones apocalípticas que describían el glorioso futuro que aguardaba a Israel durante la era de la restauración si eran fieles a Dios (Zac. 6:15).
Como un siglo después de Zacarías vino Malaquías y, con él, el fin del canon profético del AT (1 Mac. 4:46; 9:27; 14:41).
Hageo y Zacarías animaron al pueblo a levantarse y construir el templo; Zacarías recibió una serie de visiones apocalípticas que describían el glorioso futuro que aguardaba a Israel durante la era de la restauración si eran fieles a Dios (Zac. 6:15).
Como un siglo después de Zacarías vino Malaquías y, con él, el fin del canon profético del AT (1 Mac. 4:46; 9:27; 14:41).
El profeta Daniel
Aunque el libro de Daniel contiene algunos de los mensajes proféticos más importantes que encontramos en las Escrituras, el pueblo hebreo no lo incluyó en la sección profética del canon.
En vista de que se incluyen obras históricas como Josué, Jueces, Samuel y Reyes en la sección profética, es evidente que el contenido no fue el factor principal que determinó su clasificación dentro de los escritos canónicos. Sino el oficio de su escritor.
Aunque el libro de Daniel contiene algunos de los mensajes proféticos más importantes que encontramos en las Escrituras, el pueblo hebreo no lo incluyó en la sección profética del canon.
En vista de que se incluyen obras históricas como Josué, Jueces, Samuel y Reyes en la sección profética, es evidente que el contenido no fue el factor principal que determinó su clasificación dentro de los escritos canónicos. Sino el oficio de su escritor.
Así, Daniel sirvió principalmente como hombre de estado en la corte de Nabucodonosor, y aunque recibió algunas de las mayores visiones de todos los tiempos, no fue considerado un profeta en el mismo sentido que Isaías, Jeremías, Ezequiel, Oseas o los otros, cuyas vidas se dedicaron exclusivamente al oficio profético; no obstante, Cristo lo llamó profeta: "Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda)" (Mat. 24:15).
Profetas en los tiempos del Nuevo Testamento - I
En el amanecer de los tiempos del Nuevo Testamento, el don de profecía fue reactivado con las
declaraciones inspiradas de:
Elisabet
“Y aconteció que cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fue llena del Espíritu Santo, y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. ¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor” Lucas 1:41-45),
Simeón
“Y he aquí había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él. Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor. Y movido por el Espíritu, vino al templo. Y cuando los padres del niño Jesús lo trajeron al templo, para hacer por él conforme al rito de la ley, él le tomó en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo: Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz, conforme a tu palabra; porque han visto mis ojos tu salvación, la cual has preparado en presencia de todos los pueblos; luz para revelación a los gentiles, y gloria de tu pueblo Israel. Y José y su madre estaban maravillados de todo lo que se decía de él. Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, éste está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para señal que será contradicha (y una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones” (Lucas 2:25-35)
Ana
"Estaba también allí Ana, profetisa, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad muy avanzada, pues había vivido con su marido siete años desde su virginidad, y era viuda hacía ochenta y cuatro años; y no se apartaba del templo, sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones. Esta, presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalén” (Lucas 2:26-38).
declaraciones inspiradas de:
Elisabet
“Y aconteció que cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fue llena del Espíritu Santo, y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre. ¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor” Lucas 1:41-45),
Simeón
“Y he aquí había en Jerusalén un hombre llamado Simeón, y este hombre, justo y piadoso, esperaba la consolación de Israel; y el Espíritu Santo estaba sobre él. Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor. Y movido por el Espíritu, vino al templo. Y cuando los padres del niño Jesús lo trajeron al templo, para hacer por él conforme al rito de la ley, él le tomó en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo: Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz, conforme a tu palabra; porque han visto mis ojos tu salvación, la cual has preparado en presencia de todos los pueblos; luz para revelación a los gentiles, y gloria de tu pueblo Israel. Y José y su madre estaban maravillados de todo lo que se decía de él. Y los bendijo Simeón, y dijo a su madre María: He aquí, éste está puesto para caída y para levantamiento de muchos en Israel, y para señal que será contradicha (y una espada traspasará tu misma alma), para que sean revelados los pensamientos de muchos corazones” (Lucas 2:25-35)
Ana
"Estaba también allí Ana, profetisa, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, de edad muy avanzada, pues había vivido con su marido siete años desde su virginidad, y era viuda hacía ochenta y cuatro años; y no se apartaba del templo, sirviendo de noche y de día con ayunos y oraciones. Esta, presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención en Jerusalén” (Lucas 2:26-38).
Profetas en los tiempos del Nuevo Testamento - II
Unos pocos años más tarde vino Juan el Bautista en el papel de Elías:
“E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lucas 1:17). Cristo declaró que Juan fue profeta "y más que profeta":
“Pero ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Porque éste es de quien está escrito: He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, el cual preparará tu camino delante de ti” (Mateo 11:9, 10).Pablo estimó el don profético como una de las gracias del Espíritu:
“A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas” (1 Cor. 12:10).Y declaró que era uno de los mayores dones:
“Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis... Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación” (1 Cor. 14:1, 5).
Como en los tiempos del AT, el don profético no necesariamente implicaba la predicción de acontecimientos futuros, aunque este aspecto de la profecía pudiera estar incluido, sino que consistió mayormente en la exhortación y la edificación:
“Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia” (1 Cor. 14:3, 4).
“E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto” (Lucas 1:17). Cristo declaró que Juan fue profeta "y más que profeta":
“Pero ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Porque éste es de quien está escrito: He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, el cual preparará tu camino delante de ti” (Mateo 11:9, 10).Pablo estimó el don profético como una de las gracias del Espíritu:
“A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas” (1 Cor. 12:10).Y declaró que era uno de los mayores dones:
“Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis... Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación” (1 Cor. 14:1, 5).
Como en los tiempos del AT, el don profético no necesariamente implicaba la predicción de acontecimientos futuros, aunque este aspecto de la profecía pudiera estar incluido, sino que consistió mayormente en la exhortación y la edificación:
“Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia” (1 Cor. 14:3, 4).
El llamado
El llamado al oficio profético y la dádiva consiguiente del don profético eran actos de Dios, como en el caso de:
Isaías
"Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí. Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis" (Isaias 6:8, 9).
Jeremías
"Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones" (Jeremías 1:5).
Ezequiel
"Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día. Yo, pues, te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor. Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre conocerán que hubo profeta entre ellos" (Ezequiel 2:3-5)
y Amós
"Y Jehová me tomó de detrás del ganado, y me dijo: Ve y profetiza a mi pueblo Israel" (Amós 7:15).Moisés lo recibió desde la zarza ardiente: Éxodo. 3:1-4:17).El llamado de Eliseo al oficio profético fue anunciado por Elías:
Isaías
"Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí. Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis" (Isaias 6:8, 9).
Jeremías
"Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones" (Jeremías 1:5).
Ezequiel
"Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día. Yo, pues, te envío a hijos de duro rostro y de empedernido corazón; y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor. Acaso ellos escuchen; pero si no escucharen, porque son una casa rebelde, siempre conocerán que hubo profeta entre ellos" (Ezequiel 2:3-5)
y Amós
"Y Jehová me tomó de detrás del ganado, y me dijo: Ve y profetiza a mi pueblo Israel" (Amós 7:15).Moisés lo recibió desde la zarza ardiente: Éxodo. 3:1-4:17).El llamado de Eliseo al oficio profético fue anunciado por Elías:
"Partiendo él de allí, halló a Eliseo hijo de Safat, que araba con doce yuntas delante de sí, y él tenía la última. Y pasando Elías por delante de él, echó sobre él su manto. Entonces dejando él los bueyes, vino corriendo en pos de Elías, y dijo: Te ruego que me dejes besar a mi padre y a mi madre, y luego te seguiré. Y él le dijo: Ve, vuelve; ¿qué te he hecho yo?" (1 Reyes 19:19, 20).
"Alzó luego el manto de Elías que se le había caído, y volvió, y se paró a la orilla del Jordán. Y tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo" (2 Reyes 2:13, 14).
Capacidades y responsabilidades
Al llamado profético le acompañaba una entrega de capacidades especiales para que el profeta pudiera hablar en nombre de Dios.
Lo constituía en un "atalaya" o "guardián" sobre la casa de Israel:
"A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte" (Ezequiel 33:7).y lo hacía estrictamente responsable ante Dios por la entrega fiel de los mensajes que debía darles:
"Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su territorio y lo pusiere por atalaya, y él viere venir la espada sobre la tierra, y tocare trompeta y avisare al pueblo, cualquiera que oyere el sonido de la trompeta y no se apercibiere, y viniendo la espada lo hiriere, su sangre será sobre su cabeza. El sonido de la trompeta oyó, y no se apercibió; su sangre será sobre él; mas el que se apercibiere librará su vida. Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya" (Ezequiel 33:1-6).Habiendo aceptado el llamado profético, no podía abandonarlo a voluntad, como pensó hacerlo:
Jeremías
"Me sedujiste, oh Jehová, y fui seducido; más fuerte fuiste que yo, y me venciste; cada día he sido escarnecido, cada cual se burla de mí. Porque cuantas veces hablo, doy voces, grito: Violencia y destrucción; porque la palabra de Jehová me ha sido para afrenta y escarnio cada día. Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude" (Jeremías 20:7-9)
Elías
"Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías?" 1 Reyes 19:9).
Jonás
"Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová. Pero Jehová hizo levantar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad tan grande que se pensó que se partiría la nave. Y los marineros tuvieron miedo, y cada uno clamaba a su dios; y echaron al mar los enseres que había en la nave, para descargarla de ellos. Pero Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir. Y el patrón de la nave se le acercó y le dijo: ¿Qué tienes, dormilón? Levántate, y clama a tu Dios; quizá él tendrá compasión de nosotros, y no pereceremos. Y dijeron cada uno a su compañero: Venid y echemos suertes, para que sepamos por causa de quién nos ha venido este mal. Y echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres? Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado. Y le dijeron: ¿Qué haremos contigo para que el mar se nos aquiete? Porque el mar se iba embraveciendo más y más. El les respondió: Tomadme y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros. Y aquellos hombres trabajaron para hacer volver la nave a tierra; mas no pudieron, porque el mar se iba embraveciendo más y más contra ellos. Entonces clamaron a Jehová y dijeron: Te rogamos ahora, Jehová, que no perezcamos nosotros por la vida de este hombre, ni pongas sobre nosotros la sangre inocente; porque tú, Jehová, has hecho como has querido. Y tomaron a Jonás, y lo echaron al mar; y el mar se aquietó de su furor" (Jonás 1:6-15).
"Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová" (Jon. 3:1-3).
"A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte" (Ezequiel 33:7).y lo hacía estrictamente responsable ante Dios por la entrega fiel de los mensajes que debía darles:
"Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su territorio y lo pusiere por atalaya, y él viere venir la espada sobre la tierra, y tocare trompeta y avisare al pueblo, cualquiera que oyere el sonido de la trompeta y no se apercibiere, y viniendo la espada lo hiriere, su sangre será sobre su cabeza. El sonido de la trompeta oyó, y no se apercibió; su sangre será sobre él; mas el que se apercibiere librará su vida. Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya" (Ezequiel 33:1-6).Habiendo aceptado el llamado profético, no podía abandonarlo a voluntad, como pensó hacerlo:
Jeremías
"Me sedujiste, oh Jehová, y fui seducido; más fuerte fuiste que yo, y me venciste; cada día he sido escarnecido, cada cual se burla de mí. Porque cuantas veces hablo, doy voces, grito: Violencia y destrucción; porque la palabra de Jehová me ha sido para afrenta y escarnio cada día. Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude" (Jeremías 20:7-9)
Elías
"Y allí se metió en una cueva, donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías?" 1 Reyes 19:9).
Jonás
"Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; y pagando su pasaje, entró en ella para irse con ellos a Tarsis, lejos de la presencia de Jehová. Pero Jehová hizo levantar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad tan grande que se pensó que se partiría la nave. Y los marineros tuvieron miedo, y cada uno clamaba a su dios; y echaron al mar los enseres que había en la nave, para descargarla de ellos. Pero Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir. Y el patrón de la nave se le acercó y le dijo: ¿Qué tienes, dormilón? Levántate, y clama a tu Dios; quizá él tendrá compasión de nosotros, y no pereceremos. Y dijeron cada uno a su compañero: Venid y echemos suertes, para que sepamos por causa de quién nos ha venido este mal. Y echaron suertes, y la suerte cayó sobre Jonás. Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. ¿Qué oficio tienes, y de dónde vienes? ¿Cuál es tu tierra, y de qué pueblo eres? Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado. Y le dijeron: ¿Qué haremos contigo para que el mar se nos aquiete? Porque el mar se iba embraveciendo más y más. El les respondió: Tomadme y echadme al mar, y el mar se os aquietará; porque yo sé que por mi causa ha venido esta gran tempestad sobre vosotros. Y aquellos hombres trabajaron para hacer volver la nave a tierra; mas no pudieron, porque el mar se iba embraveciendo más y más contra ellos. Entonces clamaron a Jehová y dijeron: Te rogamos ahora, Jehová, que no perezcamos nosotros por la vida de este hombre, ni pongas sobre nosotros la sangre inocente; porque tú, Jehová, has hecho como has querido. Y tomaron a Jonás, y lo echaron al mar; y el mar se aquietó de su furor" (Jonás 1:6-15).
"Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová" (Jon. 3:1-3).
Como Dios se dirigía al profeta
A veces Dios se dirigía al profeta en forma audible:
"Y cuando entraba Moisés en el tabernáculo de reunión, para hablar con Dios, oía la voz que le hablaba de encima del propiciatorio que estaba sobre el arca del testimonio, de entre los dos querubines; y hablaba con él" (Números 7:89).
"Jehová llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí" (1 Samuel 3:4).
aunque más frecuentemente en sueños y visiones:
"Y él les dijo: Oíd ahora mis palabras. Cuando haya entre vosotros profeta de Jehová, le apareceré en visión, en sueños hablaré con él" (Números 12:6).
"Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios" (Ezequiel 1:1).
"Vi en visión; y cuando la vi, yo estaba en Susa, que es la capital del reino en la provincia de Elam; vi, pues, en visión, estando junto al río Ulai" (Daniel 8:2).
"José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es" (Mateo 1:19,20).
Un verdadero profeta enseñaba por el Espíritu de Dios
"Entonces se acercó Sedequías hijo de Quenaana y golpeó a Micaías en la mejilla, diciendo: ¿Por dónde se fue de mí el Espíritu de Jehová para hablarte a ti?" 1 Reyes 22:24).
"Vino el Espíritu de Dios sobre Azarías hijo de Obed" (2 Crónicas 15:1)
"Entonces el Espíritu de Dios vino sobre Zacarías hijo del sacerdote Joiada; y puesto en pie, donde estaba más alto que el pueblo, les dijo: Así ha dicho Dios: ¿Por qué quebrantáis los andamientos de Jehová? No os vendrá bien por ello; porque por haber dejado a Jehová, él también os abandonará" (2 Crónicas 24:20).
"Les soportaste por muchos años, y les testificaste con tu Espíritu por medio de tus profetas, pero no escucharon; por lo cual los entregaste en mano de los pueblos de la tierra" (Nehemías 9:30).
"Y vino sobre mí el Espíritu de Jehová, y me dijo: Di: Así ha dicho Jehová: Así habéis hablado, oh casa de Israel, y las cosas que suben a vuestro espíritu, yo las he entendido" (Ezequiel 11:5).
"Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones" (Joel 2:28).
"Mas yo estoy lleno de poder del Espíritu de Jehová, y de juicio y de fuerza, para denunciar a Jacob su rebelión, y a Israel su pecado" (Miqueas 3:8).
"y pusieron su corazón como diamante, para no oír la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de los profetas primeros; vino, por tanto, gran enojo de parte de Jehová de los ejércitos" (Zacarias 7:12).
"Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos" (1 Pedro 1:10, 11).
Y hablaba movido por el Espíritu de Dios
"entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo". (2 Pedro 1:20, 21).
El profeta entregaba el mensaje de Dios
"Les hablarás, pues, mis palabras, escuchen o dejen de escuchar; porque son muy rebeldes" (Ezequiel. 2:7;
"Luego me dijo: Hijo de hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras... Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras que yo te hablaré, y oye con tus oídos. Y ve y entra a los cautivos, a los hijos de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Jehová el Señor; escuchen, o dejen de escuchar" (Ezequiel 3:4, 10, 11).
"Balaam respondió a Balac: He aquí yo he venido a ti; mas ¿podré ahora hablar alguna cosa? La palabra que Dios pusiere en mi boca, esa hablaré" (Números 22:38).
"Y Micaías respondió: Vive Jehová, que lo que Jehová me hablare, eso diré" (1 Reyes 22:14).
"Luego me dijo: Hijo de hombre, ve y entra a la casa de Israel, y habla a ellos con mis palabras... Y me dijo: Hijo de hombre, toma en tu corazón todas mis palabras que yo te hablaré, y oye con tus oídos. Y ve y entra a los cautivos, a los hijos de tu pueblo, y háblales y diles: Así ha dicho Jehová el Señor; escuchen, o dejen de escuchar" (Ezequiel 3:4, 10, 11).
"Balaam respondió a Balac: He aquí yo he venido a ti; mas ¿podré ahora hablar alguna cosa? La palabra que Dios pusiere en mi boca, esa hablaré" (Números 22:38).
"Y Micaías respondió: Vive Jehová, que lo que Jehová me hablare, eso diré" (1 Reyes 22:14).
A veces el juicio humano del profeta era modificado por Dios
Como en el caso de Natán (2 Samuel 7:1-17)
1 Aconteció que cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos en derredor,
1 Aconteció que cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos en derredor,
2 dijo el rey al profeta Natán: Mira ahora, yo hábito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.
3 Y Natán dijo al rey: Anda, y haz todo lo que está en tu corazón, porque Jehová está contigo.
4 Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo:
5 Ve y di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar casa en que yo more?
6 Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en tabernáculo.
7 Y en todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he hablado yo palabra a alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado apacentar a mi pueblo de Israel, diciendo: ¿Por qué no me habéis edificado casa de cedro?
8 Ahora, pues, dirás así a mi siervo David: Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo, sobre Israel;
9 y he estado contigo en todo cuanto has andado, y delante de ti he destruido a todos tus enemigos, y te he dado nombre grande, como el nombre de los grandes que hay en la tierra.
10 Además, yo fijaré lugar a mi pueblo Israel y lo plantaré, para que habite en su lugar y nunca más sea removido, ni los inicuos le aflijan más, como al principio,
11 desde el día en que puse jueces sobre mi pueblo Israel; y a ti te daré descanso de todos tus enemigos. Asimismo Jehová te hace saber que él te hará casa.
12 Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino.
13 El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.
14 Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara de hombres, y con azotes de hijos de hombres;
15 pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, al cual quité de delante de ti.
16 Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.
17 Conforme a todas estas palabras, y conforme a toda esta visión, así habló Natán a David".y de Samuel (1 Samuel. 16:1-7)
1 Dijo Jehová a Samuel: ¿Hasta cuándo llorarás a Saúl, habiéndolo yo desechado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerno de aceite, y ven, te enviaré a Isaí de Belén, porque de sus hijos me he provisto de rey.
1 Dijo Jehová a Samuel: ¿Hasta cuándo llorarás a Saúl, habiéndolo yo desechado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerno de aceite, y ven, te enviaré a Isaí de Belén, porque de sus hijos me he provisto de rey.
2 Y dijo Samuel: ¿Cómo iré? Si Saúl lo supiera, me mataría. Jehová respondió: Toma contigo una becerra de la vacada, y di: A ofrecer sacrificio a Jehová he venido.
3 Y llama a Isaí al sacrificio, y yo te enseñaré lo que has de hacer; y me ungirás al que yo te dijere.
4 Hizo, pues, Samuel como le dijo Jehová; y luego que él llegó a Belén, los ancianos de la ciudad salieron a recibirle con miedo, y dijeron: ¿Es pacífica tu venida?
5 El respondió: Sí, vengo a ofrecer sacrificio a Jehová; santificaos, y venid conmigo al sacrificio. Y santificando él a Isaí y a sus hijos, los llamó al sacrificio.
6 Y aconteció que cuando ellos vinieron, él vio a Eliab, y dijo: De cierto delante de Jehová está su ungido.
7 Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón
Ninguna profecia de las Escrituras fue traida por voluntad humana
Por un tiempo Ezequiel estuvo mudo, excepto cuando entregaba un mensaje de Dios:
"En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes, vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová... Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y no serás a ellos varón que reprende; porque son casa rebelde. Mas cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son... Aconteció en el año duodécimo de nuestro cautiverio, en el mes décimo, a los cinco días del mes, que vino a mí un fugitivo de Jerusalén, diciendo: La ciudad ha sido conquistada. Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado" (Ezequiel 1:2, 3; 3:26, 27; 33:21, 22).
Esta experiencia singular fue una señal para los oyentes: cada vez que hablaba lo hacía por orden de Dios. En principio, algo similar sucedía con los demás profetas, porque ninguna profecía de las Escrituras "fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo" (2 Pedro 1:21).
Por ello, haremos "bien en estar atentos" a sus mensajes "como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga" en nuestros corazones (2 Pedro 1:19).
"En el quinto año de la deportación del rey Joaquín, a los cinco días del mes, vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová... Y haré que se pegue tu lengua a tu paladar, y estarás mudo, y no serás a ellos varón que reprende; porque son casa rebelde. Mas cuando yo te hubiere hablado, abriré tu boca, y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: El que oye, oiga; y el que no quiera oír, no oiga; porque casa rebelde son... Aconteció en el año duodécimo de nuestro cautiverio, en el mes décimo, a los cinco días del mes, que vino a mí un fugitivo de Jerusalén, diciendo: La ciudad ha sido conquistada. Y la mano de Jehová había sido sobre mí la tarde antes de llegar el fugitivo, y había abierto mi boca, hasta que vino a mí por la mañana; y abrió mi boca, y ya no más estuve callado" (Ezequiel 1:2, 3; 3:26, 27; 33:21, 22).
Esta experiencia singular fue una señal para los oyentes: cada vez que hablaba lo hacía por orden de Dios. En principio, algo similar sucedía con los demás profetas, porque ninguna profecía de las Escrituras "fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo" (2 Pedro 1:21).
Por ello, haremos "bien en estar atentos" a sus mensajes "como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga" en nuestros corazones (2 Pedro 1:19).
A veces los profetas no entendían el mensaje que les fue confiado
En algunos casos, los profetas vieron la necesidad de buscar e inquirir diligentemente el significado de las palabras que hablaban:
"Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos" (1 Pedro 1:10, 11).
Por ejemplo, se dice específicamente que Daniel no comprendió algunas porciones del mensaje que le fue confiado:
"Y yo Daniel quedé quebrantado, y estuve enfermo algunos días, y cuando convalecí, atendí los negocios del rey; pero estaba espantado a causa de la visión, y no la entendía... Y yo oí, mas no entendí. Y dije: Señor mío, ¿cuál será el fin de estas cosas? El respondió: Anda, Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin" (Daniel 8:27; 12:8, 9).
"Los profetas que profetizaron de la gracia destinada a vosotros, inquirieron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos" (1 Pedro 1:10, 11).
Por ejemplo, se dice específicamente que Daniel no comprendió algunas porciones del mensaje que le fue confiado:
"Y yo Daniel quedé quebrantado, y estuve enfermo algunos días, y cuando convalecí, atendí los negocios del rey; pero estaba espantado a causa de la visión, y no la entendía... Y yo oí, mas no entendí. Y dije: Señor mío, ¿cuál será el fin de estas cosas? El respondió: Anda, Daniel, pues estas palabras están cerradas y selladas hasta el tiempo del fin" (Daniel 8:27; 12:8, 9).
Los profetas entendían que hablaban en el nombre de Dios
Los profetas entendían claramente que hablaban en nombre de Dios, y así corrientemente introducían sus mensajes con expresiones como:
"Jehová dijo así" (Isaias 66:1).
"Jehová dijo así" (Isaias 66:1).
"Palabra que vino de Jehová a Jeremías" (Jeremías 11:1).
"Visión de Isaías hijo de Amoz" (Isaias 1:1).
"Miré, y he aquí" (Ezequiel 10:1; Apocalipsis 4:1).
"Y vi" (Apocalipsis 5:1).
Dios confirmaba la autoridad del profeta
Dios confirmaba la autoridad de los hombres que él llamó al cargo profético con el mensaje que entregaban:
"Y Samuel creció, y Jehová estaba con él, y no dejó caer a tierra ninguna de sus palabras. Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, conoció que Samuel era fiel profeta de Jehová. Y Jehová volvió a aparecer en Silo; porque Jehová se manifestó a Samuel en Silo por la palabra de Jehová" (1 Samuel 3:19-21),
Con señales sobrenaturales
"Alzó luego el manto de Elías que se le había caído, y volvió, y se paró a la orilla del Jordán. Y tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo. Viéndole los hijos de los profetas que estaban en Jericó al otro lado, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. Y vinieron a recibirle, y se postraron delante de él" (2 Reyes 2:13-15),
Con el cumplimiento de sus predicciones:
"si el profeta hablare en nombre de Jehová, y no se cumpliere lo que dijo, ni aconteciere, es palabra que Jehová no ha hablado; con presunción la habló el tal profeta; no tengas temor de él" (Deuteronomio 18:22).
"El profeta que profetiza de paz, cuando se cumpla la palabra del profeta, será conocido como el profeta que Jehová en verdad envió" (Jeremías 28:9).
y con la conformidad de sus enseñanzas con la voluntad de Dios ya revelada:
"Cuando se levantare en medio de ti profeta, o soñador de sueños, y te anunciare señal o prodigios, y si se cumpliere la señal o prodigio que él te anunció, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos, que no conociste, y sirvámosles; no darás oído a las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños; porque Jehová vuestro Dios os está probando, para saber si amáis a Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma" (Deuteronomio 13:1-3).
"¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido" (Isaias 8:20).
Aunque estaban sujetos a pasiones semejantes a las de otros seres humanos, sus vidas reflejaban los elevados principios de lo que testificaban.
Falsos profetas
A menudo se levantaban falsos profetas, como en los días de:
(1) Acab
"Entonces el rey de Israel reunió a los profetas, como cuatrocientos hombres, a los cuales dijo: ¿Iré a la guerra contra Ramot de Galaad, o la dejaré? Y ellos dijeron: Sube, porque Jehová la entregará en mano del rey... El dijo: Yo saldré, y seré espíritu de mentira en boca de todos sus profetas. Y él dijo: Le inducirás, y aun lo conseguirás; ve, pues, y hazlo así" (1 Reyes 22:6, 22).
(2) Jeremías
"No oigáis las palabras de los profetas que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira. Porque yo no los envié, dice Jehová, y ellos profetizan falsamente en mi nombre, para que yo os arroje y perezcáis vosotros y los profetas que os profetizan" (Jer. 27:14, 15).
"Aconteció en el mismo año, en el principio del reinado de Sedequías rey de Judá, en el año cuarto, en el quinto mes, que Hananías hijo de Azur, profeta que era de Gabaón, me habló en la casa de Jehová delante de los sacerdotes y de todo el pueblo, diciendo: Así habló Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, diciendo: Quebranté el yugo del rey de Babilonia... Entonces respondió el profeta Jeremías al profeta Hananías, delante de los sacerdotes y delante de todo el pueblo que estaba en la casa de Jehová. Y dijo el profeta Jeremías: Amén, así lo haga Jehová. Confirme Jehová tus palabras, con las cuales profetizaste que los utensilios de la casa de Jehová, y todos los transportados, han de ser devueltos de Babilonia a este lugar. Con todo eso, oye ahora esta palabra que yo hablo en tus oídos y en los oídos de todo el pueblo: Los profetas que fueron antes de mí y antes de ti en tiempos pasados, profetizaron guerra, aflicción y pestilencia contra muchas tierras y contra grandes reinos. El profeta que profetiza de paz, cuando se cumpla la palabra del profeta, será conocido como el profeta que Jehová en verdad envió... Entonces dijo el profeta Jeremías al profeta Hananías: Ahora oye, Hananías: Jehová no te envió, y tú has hecho confiar en mentira a este pueblo. Por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí que yo te quito de sobre la faz de la tierra; morirás en este año, porque hablaste rebelión contra Jehová. Y en el mismo año murió Hananías, en el mes séptimo" (Jeremías 28:1, 2, 5-9, 15-17),
(3) Ezequiel
"los profetas de Israel que profetizan acerca de Jerusalén, y ven para ella visión de paz, no habiendo paz, dice Jehová el Señor. Y tú, hijo de hombre, pon tu rostro contra las hijas de tu pueblo que profetizan de su propio corazón, y profetiza contra ellas" (Ezequiel 13:16, 17).
(4) Miqueas
"Sus jefes juzgan por cohecho, y sus sacerdotes enseñan por precio, y sus profetas adivinan por dinero; y se apoyan en Jehová, diciendo: ¿No está Jehová entre nosotros? No vendrá mal sobre nosotros" (Miqueas 3:11).
(1) Acab
"Entonces el rey de Israel reunió a los profetas, como cuatrocientos hombres, a los cuales dijo: ¿Iré a la guerra contra Ramot de Galaad, o la dejaré? Y ellos dijeron: Sube, porque Jehová la entregará en mano del rey... El dijo: Yo saldré, y seré espíritu de mentira en boca de todos sus profetas. Y él dijo: Le inducirás, y aun lo conseguirás; ve, pues, y hazlo así" (1 Reyes 22:6, 22).
(2) Jeremías
"No oigáis las palabras de los profetas que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira. Porque yo no los envié, dice Jehová, y ellos profetizan falsamente en mi nombre, para que yo os arroje y perezcáis vosotros y los profetas que os profetizan" (Jer. 27:14, 15).
"Aconteció en el mismo año, en el principio del reinado de Sedequías rey de Judá, en el año cuarto, en el quinto mes, que Hananías hijo de Azur, profeta que era de Gabaón, me habló en la casa de Jehová delante de los sacerdotes y de todo el pueblo, diciendo: Así habló Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, diciendo: Quebranté el yugo del rey de Babilonia... Entonces respondió el profeta Jeremías al profeta Hananías, delante de los sacerdotes y delante de todo el pueblo que estaba en la casa de Jehová. Y dijo el profeta Jeremías: Amén, así lo haga Jehová. Confirme Jehová tus palabras, con las cuales profetizaste que los utensilios de la casa de Jehová, y todos los transportados, han de ser devueltos de Babilonia a este lugar. Con todo eso, oye ahora esta palabra que yo hablo en tus oídos y en los oídos de todo el pueblo: Los profetas que fueron antes de mí y antes de ti en tiempos pasados, profetizaron guerra, aflicción y pestilencia contra muchas tierras y contra grandes reinos. El profeta que profetiza de paz, cuando se cumpla la palabra del profeta, será conocido como el profeta que Jehová en verdad envió... Entonces dijo el profeta Jeremías al profeta Hananías: Ahora oye, Hananías: Jehová no te envió, y tú has hecho confiar en mentira a este pueblo. Por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí que yo te quito de sobre la faz de la tierra; morirás en este año, porque hablaste rebelión contra Jehová. Y en el mismo año murió Hananías, en el mes séptimo" (Jeremías 28:1, 2, 5-9, 15-17),
(3) Ezequiel
"los profetas de Israel que profetizan acerca de Jerusalén, y ven para ella visión de paz, no habiendo paz, dice Jehová el Señor. Y tú, hijo de hombre, pon tu rostro contra las hijas de tu pueblo que profetizan de su propio corazón, y profetiza contra ellas" (Ezequiel 13:16, 17).
(4) Miqueas
"Sus jefes juzgan por cohecho, y sus sacerdotes enseñan por precio, y sus profetas adivinan por dinero; y se apoyan en Jehová, diciendo: ¿No está Jehová entre nosotros? No vendrá mal sobre nosotros" (Miqueas 3:11).
Pero podían ser descubiertos por:
(a) Sus motivos mercenarios (Miqueas 3:11),
(b) Su disposición a decir lo que el pueblo deseaba escuchar
"que dicen a los videntes: No veáis; y a los profetas: No nos profeticéis lo recto, decidnos cosas halagüeñas, profetizad mentiras" (Isaias 30:10).
"Si alguno andando con espíritu de falsedad mintiere diciendo: Yo te profetizaré de vino y de sidra; este tal será el profeta de este pueblo" (Miqueas 2:11).
(c) El no cumplimiento de lo que anunciaban
"si el profeta hablare en nombre de Jehová, y no se cumpliere lo que dijo, ni aconteciere, es palabra que Jehová no ha hablado; con presunción la habló el tal profeta; no tengas temor de él" (Deuteronomio 18:22).
(d) Las discrepancias entre sus mensajes y los de quienes habían sido probados como profetas
"y si se cumpliere la señal o prodigio que él te anunció, diciendo: Vamos en pos de dioses ajenos, que no conociste, y sirvámosles; no darás oído a las palabras de tal profeta, ni al tal soñador de sueños; porque Jehová vuestro Dios os está probando, para saber si amáis a Jehová vuestro Dios con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma" (Deuteronomio 13:2, 3)
"¡A la ley y al testimonio! Si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido" (Isaias 8:20).
"Hablé también a Sedequías rey de Judá conforme a todas estas palabras, diciendo: Someted vuestros cuellos al yugo del rey de Babilonia, y servidle a él y a su pueblo, y vivid. ¿Por qué moriréis tú y tu pueblo a espada, de hambre y de pestilencia, según ha dicho Jehová de la nación que no sirviere al rey de Babilonia? No oigáis las palabras de los profetas que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira. Porque yo no los envié, dice Jehová, y ellos profetizan falsamente en mi nombre, para que yo os arroje y perezcáis vosotros y los profetas que os profetizan. También a los sacerdotes y a todo este pueblo hablé diciendo: Así ha dicho Jehová: No oigáis las palabras de vuestros profetas que os profetizan diciendo: He aquí que los utensilios de la casa de Jehová volverán de Babilonia ahora pronto; porque os profetizan mentira" Jeremías 27:12-16).
(e) Apelar a los deseos de los impíos
"Entonces el rey de Israel reunió a los profetas, como cuatrocientos hombres, a los cuales dijo: ¿Iré a la guerra contra Ramot de Galaad, o la dejaré? Y ellos dijeron: Sube, porque Jehová la entregará en mano del rey. Y dijo Josafat: ¿Hay aún aquí algún profeta de Jehová, por el cual consultemos? El rey de Israel respondió a Josafat: Aún hay un varón por el cual podríamos consultar a Jehová, Micaías hijo de Imla; mas yo le aborrezco, porque nunca me profetiza bien, sino solamente mal. Y Josafat dijo: No hable el rey así" (1 Reyes 22:6-8).
(f) Sus propias vidas no consagradas
"Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. Así que, por sus frutos los conoceréis" (Mateo 7:15-20).
Creed a sus profetas, y seréis prosperados
Del mismo modo que un profeta es un vocero o mensajero de Dios, la profecía es todo mensaje presentado de parte de Dios por orden de él: revelación especial de la voluntad y del pensamiento divino, destinada a capacitar al hombre para cooperar con los propósitos infinitos de Dios, que consiste esencialmente en consejos, orientaciones, reprensiones y advertencias.
Como "no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas" (Amós 3:7), él espera que los que lean lo que los profetas escribieron le presten la más cuidadosa atención.
Al hacerlo podrán estar seguros y ser prosperados: "Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados" (2 Crónicas 20:20).
Los que no prestan atención a las palabras de un profeta como mensajero o guardián enviado por Dios son personalmente responsables ante el Señor:
"Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma. Si el justo se apartare de su justicia e hiciere maldad, y pusiere yo tropiezo delante de él, él morirá, porque tú no le amonestaste; en su pecado morirá, y sus justicias que había hecho no vendrán en memoria; pero su sangre demandaré de tu mano. Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma" (Ez. 3:17-21).
"Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra, y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su territorio y lo pusiere por atalaya, y él viere venir la espada sobre la tierra, y tocare trompeta y avisare al pueblo, cualquiera que oyere el sonido de la trompeta y no se apercibiere, y viniendo la espada lo hiriere, su sangre será sobre su cabeza. El sonido de la trompeta oyó, y no se apercibió; su sangre será sobre él; mas el que se apercibiere librará su vida. Pero si el atalaya viere venir la espada y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno, éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya. A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. Cuando yo dijere al impío: Impío, de cierto morirás; si tú no hablares para que se guarde el impío de su camino, el impío morirá por su pecado, pero su sangre yo la demandaré de tu mano. Y si tú avisares al impío de su camino para que se aparte de él, y él no se apartare de su camino, él morirá por su pecado, pero tú libraste tu vida" (Ezequiel 33:1-9).
Israel, por lo general, rechazó las emocionantes apelaciones de los profetas:
"Ay de vosotros, que edificáis los sepulcros de los profetas a quienes mataron vuestros padres! De modo que sois testigos y consentidores de los hechos de vuestros padres; porque a la verdad ellos los mataron, y vosotros edificáis sus sepulcros" (Lucas 11:47, 48).
Así como Dios lo había advertido a Isaías: "Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis. Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad. Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto" (Isaias 6:9-11)
Y a Jeremías: "No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová...Tú, pues, ciñe tus lomos, levántate, y háblales todo cuanto te mande; no temas delante de ellos, para que no te haga yo quebrantar delante de ellos... Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte" (Jeremías 1:8, 17, 19).
Esto trajo la ruina sobre Israel, lo condujo a su rechazo del Mesías y, así, a ser descartada como nación
Belleza literaria de las profecías
Muchas de las profecías del AT están escritas en poesía hebrea. La calidad y la forma literarias reflejan el carácter, la educación y el estado emocional del profeta.
La personalidad de Jeremías está grabada vívidamente en el registro de su misión profética, hasta el punto en que un lector cuidadoso casi puede sentir que lo conoce personalmente.
Algunas obras, como las de Isaías, Joel y Habacuc son de una belleza literaria superior y reflejan un desarrollo lógico del pensamiento.
Pasajes como los de Isaías 9:1-7; 40:1-8; 52:7-53:12; 55; 61:1-3 y Joel 2:1-14 no han sido superados en imágenes gráficas, retórica equilibrada y lenguaje pintoresco.
En algunas obras, como la de Jeremías, los hechos históricos constituyen el molde en el que se presentaron los mensajes proféticos. Otras parecen ser colecciones de sermones.
Algunos profetas, como Oseas, reflejan hondas emociones y, como resultado, no se prestan fácilmente a un análisis literario lógico.
La profecía de Habacuc también manifiesta un profundo sentir humano al describir el profeta su propia lucha para comprender la voluntad revelada de Dios y su reconciliación con ella.
La abarcante obra de los profetas
Los profetas se ocuparon del trato de Dios con Israel en lo pasado (Ezequiel 16; 20; etc.), y dejaron lecciones importantes para la generación actual.
También se ocuparon de los acontecimientos históricos contemporáneos, señalando los propósitos divinos y la realización de su voluntad entre las naciones (Isaias 36-39; la mayor parte de Jeremías; muchos pasajes de Ezequiel; Daniel 1-6; Hageo; etc.).
A menudo, y extensamente, denunciaron los pecados de Israel (Isaias 1:2-15; 3:12-15; 9:13; 10:2; Jer. 2:5-35; Ezequiel 8:5-16; Oseas 5; Amós 8:1-6; Malaquías).
Destacaron continuamente la responsabilidad personal de los que escuchaban sus mensajes de actuar en armonía con ellos (Ezequiel 3:17-21; cf 18:25-32; 33:7-16: etc.).
A menudo instaron a realizar actos específicos (Isaias 1:16-20; Jeremías 27:1-18; 29:5-13; 38:14-23; 42:1-18; JoeI. 2:12, 13; Amós 5:4-15; Hageo 1:7, 8; Malaquías 3:10-12; etc.).
Fielmente señalaron las consecuencias del mal hacer (Isaias 2:10-21; 7:17-25; 24; Jeremías 4; 18:9, 10; 23:9-40; 24; Ezequiel 4; 5; 9; Daniel 9:3-14; Oseas 5; JI. 1; Amós 7-9; Sofonías; etc.) y del bien hacer (Isaias 1:18-20; 38; Jeremías 7:2-7; 17:20-26; 18:7, 8, Oseas 14; JoeI. 2:12-32; etc.).
Con frecuencia, mediante los profetas Dios elevó los ojos de su pueblo al glorioso futuro que los esperaba como nación si cooperaban cabalmente con sus propósitos para ellos (Isaias 40-66; Jeremías 33; Ezequiel 36-48; Miqueas 4; Zacarías; etc.).
La culminación de sus mensajes siempre era la venida del Mesías y el establecimiento de su reino (Isaias 9:1-7; 11:1-12; 12; 25; 52-66; Daniel 2:44; 7:18, 27; JoeI. 3:9-21; Miqueas 4:1-5:15; etc.).
También se ocuparon de los acontecimientos históricos contemporáneos, señalando los propósitos divinos y la realización de su voluntad entre las naciones (Isaias 36-39; la mayor parte de Jeremías; muchos pasajes de Ezequiel; Daniel 1-6; Hageo; etc.).
A menudo, y extensamente, denunciaron los pecados de Israel (Isaias 1:2-15; 3:12-15; 9:13; 10:2; Jer. 2:5-35; Ezequiel 8:5-16; Oseas 5; Amós 8:1-6; Malaquías).
Destacaron continuamente la responsabilidad personal de los que escuchaban sus mensajes de actuar en armonía con ellos (Ezequiel 3:17-21; cf 18:25-32; 33:7-16: etc.).
A menudo instaron a realizar actos específicos (Isaias 1:16-20; Jeremías 27:1-18; 29:5-13; 38:14-23; 42:1-18; JoeI. 2:12, 13; Amós 5:4-15; Hageo 1:7, 8; Malaquías 3:10-12; etc.).
Fielmente señalaron las consecuencias del mal hacer (Isaias 2:10-21; 7:17-25; 24; Jeremías 4; 18:9, 10; 23:9-40; 24; Ezequiel 4; 5; 9; Daniel 9:3-14; Oseas 5; JI. 1; Amós 7-9; Sofonías; etc.) y del bien hacer (Isaias 1:18-20; 38; Jeremías 7:2-7; 17:20-26; 18:7, 8, Oseas 14; JoeI. 2:12-32; etc.).
Con frecuencia, mediante los profetas Dios elevó los ojos de su pueblo al glorioso futuro que los esperaba como nación si cooperaban cabalmente con sus propósitos para ellos (Isaias 40-66; Jeremías 33; Ezequiel 36-48; Miqueas 4; Zacarías; etc.).
La culminación de sus mensajes siempre era la venida del Mesías y el establecimiento de su reino (Isaias 9:1-7; 11:1-12; 12; 25; 52-66; Daniel 2:44; 7:18, 27; JoeI. 3:9-21; Miqueas 4:1-5:15; etc.).
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